El psicólogo y profesor universitario Juan Capafons atesora un amplia experiencia en el trabajo con los jóvenes. Reflexiona sobre el teléfono móvil en el aula: "Prohibirlo en los colegios es una medida similar a la cuarentena como estrategia para que no se propague un virus". Entiende que es una técnica burda, pero normalmente eficaz. Lo explica: "Es burda porque esconde en la mayoría de las ocasiones el desconocimiento. No sabemos exactamente cómo se propaga, no sabemos exactamente a quién le afecta de forma mortal y, lo que es más importante, desconocemos el tratamiento realmente eficiente". Apuesta por el buen uso de las nuevas tecnologías y plantea que este tiene que ser un tema de investigación prioritaria para que los especialistas sepan orientar con precisión y eficiencia a los agentes sociales. "Hasta que avancemos todo lo que tenemos que avanzar en esa investigación la tendencia de los dirigentes será aplicar técnicas de cuarentena. Muerto el perro se acabo la rabia". Para el profesor Capafons, "el reto es enseñar el buen uso, prohibir es la solución producto de la ignorancia. Pero en ocasiones, la única solución".

Eusebio Dorta preside la Asociación Insular Tinerfeña de Padres y Madres de Alumnado (FITAPA). Considera que el uso del móvil no debe interrumpir nunca el desarrollo normal de las clases pero también es interesante como herramienta aunque "siempre con el control del profesor". Rechaza que el alumno se dedique a llamar o conectarse en redes sociales en mitad de las horas lectivas. "Regular y limitar su uso", resume. Y concluye: "Muchos chicos lo usan cuando está punto de terminar la clase".