Un "engorroso" trámite burocrático, sumado a un aumento de la demanda de hasta el 30%, ha dejado a Canarias desde principios de enero sin poder suministrar las vacunas de la meningitis, Mencevax, y de la varicela, Varivax, a los niños y niñas canarios de 12 años. La consejera de Sanidad, Teresa Cruz Oval, firmó este pasado viernes la orden que finaliza los trámites para garantizar este suministro de estas vacunas por parte de los laboratorio Pfizer y MSD, respectivamente, en el plazo de dos semanas. En todo caso, los expertos recuerdan que la protección está garantizada en este grupos de edad ya que pueden recibir la medicación en los 365 días siguientes a cumplir 12 años.

Esta situación ha afectado a varias familias en el Archipiélago que han denunciado que, al acudir a su centro de salud en los últimos meses, el pediatra les ha informado de esta falta de vacunas. De hecho, un padre explicó que al acudir con su hija a su centro de salud, el Doctor Guigou en Santa Cruz de Tenerife, en una cita regular, los especialistas le avisaron de que no podían suministrarle la vacuna y que sabían cuándo se podría resolver.

"Es vergonzoso, no hay epidemia pero en cualquier momento podría saltar y la meningitis es una enfermedad que puede provocar efectos secundarios irreversibles", afirmó el padre, que señaló que el médico le emplazó en una nueva cita en abril aunque "no sabía si podría vacunar a mi hija entonces". Teniendo en cuenta la cohorte de jóvenes de 12 años en las Islas, se puede determinar que esta falta ha estado afectando a un total de 17.000 niños en todo el Archipiélago.

Trámite de adjudicación

Todos los años, al comienzo de enero, la Consejería de Sanidad debe expedir un trámite de adjudicación provisional de todas las vacunas disponibles en el calendario vacunal. Normalmente, aunque tarde en resolverse, no suele haber problemas porque se suele "comprar previendo la demanda para un año y el primer trimestre", como explicó Amós García Rojas, Jefe de sección de Epidemiología y Prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias. Sin embargo, en esta ocasión se ha unido una ingente demanda de vacunas -más de las que se había estimado que se necesitarían durante 2019-, con un trámite burocrático que ha tardado más de lo previsto en hacerse efectivo.

El pasado viernes la Directora General firmó la adjudicación definitiva del contrato y, a falta de la firma de la Consejera de Sanidad, Teresa Cruz Oval, se espera que hoy mismo pueda remitirse a los laboratorios para empezar a suministrarlas con normalidad en el plazo de dos semanas. "Nos hemos puesto en contacto con los laboratorios para urgirles a administrar las vacunas desde que les llegue este documento", explicó Amós que asegura que esta situación "nos ha traído a todos de cabeza" porque "el proceso de adjudicación ha sido más largo de lo normal". Además, el suministro se demorará durante un tiempo más largo que si este problema ocurriera en la Península porque el pedido debe recorrer el Atlántico para llegar hasta Canarias. "Aquí llega en barco y es tremendamente lioso", insistió el epidemiólogo.

En todo caso, García Rojas señaló que "los niños de 12 años tienen un año para ponérsela", con lo cual no existen repercusiones en la salud más allá de la molestia de poder haber acudido a una cita y que no se la hayan podido dispensar. Según el jefe de epidemiología, se van a adquirir 20.000 dosis de vacuna de la varicela y un número que aún se debe determinar de la tetravalente de Meningitis. Y es que, en este último caso, no solo se pretende vacunar a los pequeños de 12 años si no también a todos a los que hayan cumplido 18 años este año. "Se trata de una dosis para garantizar la protección a todos los jóvenes de las Islas", explicó García Rojas, que afirmó que este trabajo se quiere realizar anualmente durante los próximos seis años: "hasta que los primeros que se vacunaron cumplan 18".

Cabe recordar que la protección para la meningitis de los tipos ACWY se incluyó en el año 2019 en el calendario vacunal. Algunas comunidades autónomas han decidido esperar para hacer efectiva la inclusión, pero Canarias determinó que comenzaría de inmediato el suministro de esta vacuna. De hecho, junto a esta nueva vacuna también se incluyó en el calendario vacunal canario la de la meningitis tipo B -conocida como Bexsero - y la del Virus del Papiloma Humano con protección para nueve serotipos. Así, el calendario vacunal de las Islas se convirtió en uno de los más avanzados de toda España. Concretamente, anunció la inclusión de estas tres vacunas en febrero de 2019 y lo hizo efectivo antes del verano.

Respecto al Varivax, no es la primera vez que ocurre un desabastecimiento de esta vacuna en las Islas. Concretamente, el pasado diciembre, Salud Pública admitió que había habido un desabastecimiento puntual de la vacuna que afectó dos semanas al suministro normal. Entonces, el problema se fue solventando por parte de los propios profesionales sanitarios que han estado haciendo pedidos puntuales a otros centros. En aquel momento, García Rojas insistió en que "este tipo de contratiempos son fácilmente solventables". Varivax es una vacuna constituida por virus vivos atenuados de la varicela, se suministra en Canarias, además de a los 12 años, también a los 15 meses. Además, a los tres años, Sanidad inyecta en los niños un "producto combinado" , conocido como vacuna tetra-vírica, que cuenta con antígenos de cuatro virus distintos: sarampión, rubeóla, parotiditis y varicela. Lo que permite que la protección esté garantizada.

El también presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV) quiso hacer hincapié en que, aunque esta vez haya sido por un expediente burocrático, estas situaciones también pueden suceder más frecuentemente por la cada vez mayor concentración de laboratorios que se encargan de fabricar vacunas. "Nos deja poco margen de maniobra", afirmó el médico. De hecho, hace dos años, los niños de seis años de toda España sufrieron las consecuencias de un fallo de producción de la vacuna tetravalente para la Difteria, el Tétanos y la Tos ferina (dTpa).

Un año sin vacunarse

Los niños permanecieron un año sin poder vacunarse. Y es que el desarrollo de vacunas se prolonga entre dos y tres años, recordó García Rojas, que hizo hincapié en que no existe un botón mágico que permita crear este tipo de fármacos inmediatamente. Por esta razón, el epidemiólogo considera que "no es bueno que no haya competencia" entre los laboratorios. García Rojas recordó que las vacunas "no son fármacos", por tanto su producción tampoco es similar.

"Cuando falta un fármaco se puede reponer con rapidez, pero una vacuna, al tratarse de un producto biológico, puede tardar hasta dos años en acabar de producirse", afirmó, y recordó que esa "lentitud" de producción es justamente lo que confiere "seguridad" al producto.