El joven que besó en la cara el pasado sábado a la periodista de Radio Televisión Canaria Raquel Guillán mientras informaba en directo desde Lanzarote sobre la situación de la intesa calima en la isla, ha sido condenado a una multa de 2.410 euros y no podrá acercarse durante un periodo de16 meses a la redactora a una distancia inferior a 300 metros de su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro frecuentado por ella, ni tampoco podrá comunicarse con la misma por cualquier medio o procedimiento.

Así lo recoge la sentencia del Juzgado de Instrucción Nº2 de Arrecife tras el juicio rápido celebrado este martes en el Palacio de Justicia de la capital lanzaroteña. El joven reconoció los hechos y el juez dictó un fallo de conformidad, que es firme.

El pasado sábado 23 de febrero la Televisión Canaria presentó una denuncia en una comisaria por una "agresión machista" que sufrió la periodista Raquel Guillán cuando se encontraba trabajando en una conexión en directo informando sobre las consecuencias del mal tiempo en Lanzarote.

La redactora, que denunció lo ocurrido en la Policía Nacional de Arrecife, ha recibido un amplio apoyo dentro y fuera de los medios de comunicación y lo ocurrido generó una protesta en las redes sociales a raíz de tan lamentable y "machista" suceso.

El ataque machista continuó tras el directo según indicó el presentador Paco Luis Quintana ya que una vez finalizado el directo, el varón agredió físicamente a la periodista empujándola y haciendo que cayera contra el suelo cuando Guillán le recriminó su actuación. Por estos motivos se realizó la denuncia cuyo juicio se ha celebrado.

El autor ha sido condenado por un delito de abusos sexuales, por el que ha sido penado con 12 meses de multa a razón de una cuota diaria de 6 euros (2.160 euros en total) y la citada condena de alejamiento.

Asimismo, el procesado también ha sido juzgado y condenado por un delito leve de lesiones, que conlleva 20 días de multa a razón de una cuota diaria de 6 euros (120 euros). El chico agredió a la periodista tirándole del pelo y empujándola después de que esta se negara a entregarle la cartera que se le había caído mientras huía tras darle un beso en la cara en el momento en el que Guillán realizaba la conexión en directo. Por último, el condenado debe indemnizarla con 130 euros en concepto de responsabilidad civil.