El que hasta ahora había asumido las funciones del Instituto Español de Oceanografía (IEO), Eduardo Balguerías, ha presentado su dimisión al frente del Organismo Público de Investigación (OPI), tan solo una semana después de que se desatara una crisis por la que, por culpa de un trámite burocrático, al menos ocho grupos de investigación de las Islas -y otros cuantos de toda España- iban a tener que parar sus salidas al mar por falta de buques. Así lo anunció ayer el Ministerio de Ciencia, que ascendió al actual subdirector general de investigación del IEO, Rafael González-Queirós, a la dirección del Organismo de manera transitoria, "hasta el nombramiento de un nuevo titular".

Asimismo, el Ministerio de Ciencia, consciente de los problemas de gestión que está atravesando el Instituto Español de Oceanografía (IEO), ha decidido, entre otras acciones, crear un Grupo de Trabajo en el que se integrarán científicos y gestores tanto del IEO como externos, y cuya misión será elaborar en el plazo de dos meses un informe de la situación y proponer las medidas necesarias para la recuperación total del IEO.

Este Grupo será pilotado por el secretario general de Investigación, Rafael Rodrigo. Al mismo tiempo, el Ministerio, a través de sus órganos competentes, analizará la situación a corto y medio plazo del IEO para garantizar que los proyectos de investigación tengan la continuidad necesaria. "Con estas medidas se pretende que el IEO siga manteniendo el alto nivel de investigación y de prestación de servicios técnicos", afirmó el Ministerio en un comunicado de prensa.

Para el investigador canario, Pedro Vélez, "es muy positivo" que se haya dado este paso y afirmó que ahora "se abre una oportunidad para revertir los problemas de gestión ineficiente".