La Dirección General de Tráfico impuso el pasado año 26.981 multas por exceso de velocidad en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, gracias a los radares fijos, así como a los estáticos y dinámicos que portan los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil por diversas vías. De forma global, en el 2019 hubo cerca de 600 sanciones más que en el 2018. En algunos puntos, los conductores parecen haber aprendido la lección y se han reducido las infracciones. En otros enclaves, en cambio, han subido.
Kilómetro 20
En las islas occidentales, con una gran diferencia sobre el resto, el radar fijo más activo se encuentra en La Palma, de forma concreta en la carretera insular que conecta la capital con el municipio de Los Llanos de Aridane (LP-3), a la altura de El Paso. En el punto kilométrico 20, frente al centro de visitantes de La Caldera de Taburiente, la velocidad está limitada a 50 kilómetros por hora.
Pero, tras salir del túnel, en sentido a la vertiente oeste de la Isla, existe una recta bastante larga que invita a acelerar. Varias señales advierten de que la velocidad está controlada por radar e informan de que esta debe reducirse de forma progresiva. Muchos residentes en La Palma conocen la ubicación del equipo y circulan de forma adecuada. Pero no ocurre lo mismo con miles de turistas que visitan la denominada Isla Bonita cada año.
En el 2019, dicho equipo captó 14.096 excesos de velocidad, exactamente 900 más que en el 2018. Cabe destacar que en el 2017 registró 7.335 casos. Así se desprende de los datos divulgados por Automovilistas Europeos Asociados (AEA). Eso significa que en dos años casi ha duplicado su registro de infracciones. Hasta tal punto llega el desconocimiento de la ubicación del equipo que algunos usuarios tocan el claxon a los que circulan a la velocidad correcta para que aceleren y no vayan tan despacio.
Según una de las fuentes consultadas por este periódico entre los cuerpos de seguridad de La Palma, el 80 o el 90 por ciento de los sancionados "son foráneos". El segundo radar más activo en la provincia también es fijo y se halla en la autopista del Sur de Tenerife (TF-1), a la altura del kilómetro 59,2, en sentido a Santiago del Teide, poco después del acceso al aeropuerto. En el año 2019 se contabilizaron 6.566 sanciones, unas 2.417 más que en el 2018. En el 2017 se registraron 5.335 denuncias. Se trata de uno de los tramos con mayor densidad de tráfico de toda la Isla.
Vía de Ronda
La reducción más espectacular en el número de infracciones se ha detectado en el radar fijo situado en el kilómetro 0,5 de la Vía de Ronda (TF-13), a la altura de Barrio Nuevo, en La Laguna. La bajada en la captación de excesos de velocidad ha sido superior a las 26.000. En el 2017 se detectaron 28.703 casos, con lo que era uno de los más activos de todo el país. En el 2018 bajaron a 6.923, mientras que el pasado año se quedaron en 2.699, según las cifras de Automovilistas Europeos Asociados (AEA).
En el cuarto puesto de los equipos "más multones" de Tenerife figura el ubicado en la autopista del Norte (TF-5), a la altura de la localidad de Guamasa, también en La Laguna. En el kilómetro 15 de la citada vía, en dirección a Santa Cruz, fueron captados 1.062 excesos de velocidad en el 2019, frente a los 1.034 de 2018 y los 1.128 del 2017. Es decir, que ha mantenido un nivel estable de incidencias en los últimos ejercicios. La autopista del Norte es una de las que registra mayor densidad de tráfico de la Isla, junto a la TF-1. Las importantes retenciones registradas por la mañana en sentido a la capital y en las primeras horas de la tarde hacia Los Realejos han motivado que el Gobierno canario y el Cabildo impulsen una nueva vía alternativa entre Guamasa y la Vía de Ronda.
