"Fui a las 8 de la mañana por una inflamación en los ganglios y no salí de las Urgencias del hospital hasta las 11 de la noche". Así narra un paciente su experiencia en este servicio en los últimos días. Durante su estancia, los profesionales le tuvieron que realizar muchas pruebas distintas, y afirma que, cuando por fin salió, la sala de espera "estaba reventada de gente". Como él, otro paciente cuenta su experiencia en los servicios de atención urgente, esta vez en un centro de salud. "Me hice daño en el gemelo y fui a mi centro más cercano", afirma. "Llegué a las 8 de la tarde y salí a las 11, aunque solo tenía seis personas delante", explica el paciente. Resultó que el afectado tenía una rotura parcial del gemelo, pero su patología era menos urgente que la de las personas que iban llegando a goteo a las Urgencias de este centro de atención primaria.