A las 15:00 horas de ayer, el Aula 25 Aniversario del Hospital Universitario de Canarias (HUC) se llenó de una marea blanca con las manos levantadas. De forma unánime, todos los médicos del centro mostraron su interés en secundar una huelga indefinida. Y si sus compañeros de La Candelaria se manifiestan en el mismo sentido el próximo jueves, lo harán en el plazo de dos semanas. ¿El detonante? La actual convocatoria de oposiciones para facultativos especialistas de área (FEAS). La gestión de la socialista Teresa Cruz, a cargo de la Consejería de Sanidad, no está convenciendo a este sector sanitario, que está imbuido en un tirante conflicto con la Administración sanitaria desde principios de diciembre.

El conflicto dinamitó, tras la convocatoria de esta oferta pública de empleo (OPE) para FEAS -que incluye las plazas de los años 2016, 2017 y 2018, así como las de estabilización-, momento en que los médicos comenzaron una contienda abierta contra la Consejería de Sanidad. Y es que, tal y cómo están organizadas las oposiciones actualmente, no responden a las necesidades de los servicios sanitarios, según denuncian los propios facultativos. De hecho, insisten en que puede llegar a provocar la pérdida del funcionamiento de estas unidades más especializadas durante un máximo de seis meses, hasta que los nuevos profesionales que tomen posesión se especialicen en las tareas que han estado haciendo durante lustros e incluso décadas los interinos que les precedían.

Los profesionales se reunieron ayer en una multitudinaria asamblea convocada por el Sindicato de Médicos de Santa Cruz de Tenerife (CESM) en el HUC, en la que se debatió, entre otros aspectos, las siguientes medidas de presión a tomar contra las oposiciones convocadas por el departamento que dirige Cruz Oval. Desde principios de diciembre, los médicos se han movilizado para reivindicar dos aspectos que, a su juicio, deberían integrar la convocatoria de las oposiciones: la adjudicación de plazas por gerencias y el incremento de plazas en favor del HUC. La primera de ellas ha acabado por excluirse como reivindicación después de que los representantes de Sanidad el pasado 24 de diciembre recordaran que las bases ya publicadas proponen un sistema de adjudicación similar al de los exámenes del MIR. Es decir, serán los facultativos que obtengan mayor puntuación los que elijan primero plaza en cualquiera de las gerencias donde haya una libre. De esta manera, a pesar de haber "echado los papeles" en una gerencia concreta, no se priorizará a los médicos que hayan hecho el papeleo en dicho hospital.

Alta tasa de interinidad

Pero los médicos están convencidos de que esta convocatoria de oposiciones no va a acabar con la alta tasa de interinidad que existen en ambos hospitales de Tenerife y que alcanza el 60%. Según los datos recabados por los profesionales, una vez se celebre la convocatoria de la OPE bajo las condiciones actuales, esa temporalidad bajará hasta el 28% en La Candelaria, pero solo lo hará hasta el 41% en el HUC. Por esta razón, insisten en solicitar que se sumen el centenar de plazas de la OPE 2019 (recientemente publicadas) directamente a este centro que, como recuerda Levy Cabrera, secretario general del CESM, "es el que cuenta con menos plazas interinas en plantilla".

"Queremos que Sanidad nos proporcione datos concretos sobre a qué centro hospitalario se sumarán esas plazas y en qué especialidades", indicó Levy Cabrera, secretario general del CESM. Cabe recordar que Sanidad se ha comprometido a "trabajar para acumular las plazas de la OPE correspondiente a 2019 en la convocatoria que ya se encuentra en marcha", además de "dar una mayor preeminencia a las plazas de FEAS en el Área del HUC". Sin embargo, estas promesas no han convencido a los facultativos, que seguirán presionando hasta que se les proporcione una respuesta clara. Asimismo, los facultativos han añadido una nueva reinvidicación a su bateria de peticiones.

"Queremos que se creen las plazas de los especialistas que llevan más de un año en una", explicó Cabrera. Pero la reivindicación va más allá. "A los que lleven tres meses ejerciendo en una plaza, deben hacerlos interinos", insistió. De esta manera, remarcó el secretario general, se podría dar estabilidad al personal al tiempo que se les fideliza en el Servicio Canario de Salud (SCS). Los médicos van a dar el plazo de una semana a la Administración sanitaria para responder a esta medida de presión. Si no lo hacen -y el resto de facultativos no muestra oposición a la medida-, el próximo miércoles el sindicato registrará el preaviso de huelga. Mañana jueves se celebrará en el Hospital Universitaro Nuestra Señora de Candelaria otra asamblea con los facultativos del centro y el lunes se culminará la ronda asamblearia con una reunión en el seno del sindicato de médicos. El objetivo será empezar a ejecutar servicios mínimos "a final de enero o principios de febrero", afirmó Cabrera.