Dani, Cristian, Odalie, Ione, Killian... Así hasta una quincena de alumnos del Centro de Educación Obligatoria (CEO) Bethencourt y Molina de Barranco Grande en el municipio de Santa Cruz . Forman el grupo dinamizador y motriz de la emisora de radio que por tercer año consecutivo pone en marcha el colegio. Están nerviosos esta mañana del debut en un estudio completo, como cualquier otro, instalado en un aula y en el que ellos se han repartido los roles profesionales. Unos releen los guiones, mientras otros repasan la técnica. Bajo la atenta mirada de quienes mantienen con firmeza esta idea apoyados por el equipo directivo: el educador social Ruymán Afonso, director de facto, y el realizador, Juan Carlos Herrera.

La radio no tiene nombre aunque Ruymán apunta uno sonoro: "Radio B y M". Gusta entre estos chicos de 13 a 15 años que forman parte del curso de 1º de PEMAR. ¿Qué es PEMAR? Pues Programa para la Mejora del Aprendizaje y el Rendimiento. Todos ellos llegados de distintos barrios del Suroeste de la capital tinerfeña como el de domicilio del centro o Añaza, han tenido distintos problemas sociales, convivenciales y de integración. Su tutora es Lourdes Delgado. La presión de un día tan especial puede con ellos y hay una pequeña discusión que resuelven con una terapia grupal justo antes de empezar. Para disculparse.

Afonso destaca que "este es un proyecto educativo con afán de continuidad. Pero dependemos de la financiación". Por eso a la inauguración acuden representantes de La Caixa e institucionales. Desde el Gobierno de Canarias al Ayuntamiento de Santa Cruz. Hoy, sin embargo, los protagonistas son ellos, los alumnos.

EL DÍA los visita en su clase. En los momentos previos a pasar al estudio que ocupa el Aula de Idiomas. Van repartiendo los papeles según lo han desarrollado previamente. De la teoría a la práctica y dentro de un proyecto planteado, debatido y ejecutado para formar parte del currículo académico.

Poco a poco superan la timidez inicial y contestan a las preguntas. Se les nota implicados, motivados y responsabilizados con la iniciativa. Algunos tienen muy buena voz y otros, como Dani, son auténticos animales de la comunicación. Repiten para el visitante lo que marca el guión porque, como en todas radio que se previa, hasta la improvisación está guionizada.

Van a ser por un día locutores, técnicos, redactores, productores... Todos aquellos oficios que, unidos, constituyen una emisora de radio. Incluida la pecera donde Juan Carlos se afana en dar las últimas instrucciones a sus chicos entre ordenadores.

Para estos chicos la oportunidad pasa por trabajar de otra manera ante sus dificultades para el aprendizaje tradicional. El PEMAR es una manera de que sigan enganchados al sistema educativo porque corren riesgo de abandono y caer en el absentismo.

Su profesora, Lourdes, suele trabajar con jóvenes como ellos y en una labor similar lleva ocho años en el Bethencourt y Molina. Muestra su orgullo porque "se han involucrado en esta idea. Mi tarea muchas veces es mediar en conflictos pero este grupo y esta iniciativa son algo fantástico"

La directora desde hace dos cursos, aunque también lleva ya ocho en el centro, María José Zamorín valora "muy positivamente la experiencia. Interesante y distinta. Ideal para potenciar en el alumnado otras cualidades y motivarles para que no dejen los estudios. El proyecto viene de la anterior dirección pero lo hemos mantenido y esperamos que tenga continuidad. Para eso trabajamos".

Una financiación vital

La financiación de La Caixa ha sido fundamental. Para dos cuestiones. Por un lado, mantener los equipos, y por otro, contratar al técnico. Una figura que sería la de actual de Herrera quien es Técnico en Animación Sociocultural de Radio Comunitaria. Este insiste en la condición de "proyecto educativo" de la iniciativa de una radio escolar en el CEO. Aunque se necesiten como en cualquier emisora que se precie del mundo un equipo técnico, un trabajo de investigación o la necesaria vocalización.

La conjura ante el reto es comunitaria. También forma parte de este sentido colectivo Aarón Báez, un alumno de 4º de la ESO, enamorado del deporte, sobre todo el mundo del motor. Él se encarga de la información deportiva en esta primera emisión. El dicharachero Daniel, por su parte, demuestra que lo vive intensamente. Le encanta locutar, se le nota, y lo hace bastante bien. "3.2,1... adelante" canta Juan Carlos, el técnico. En la pecera, el locutor arranca: "Buenos días; aquí Radio B y M".