La Universidad de La Laguna y Loro Parque Fundación se unen en su lucha contra el uso del plástico para aminorar los efectos del cambio climático. Las dos instituciones participan en el proyecto Bye bye, plastic, pensado para mentalizar a la población del daño que causan los deshechos no biodegradables en la naturaleza.

La sesión inaugural en el Paraninfo de la ULL dio paso al acto de inauguración de una escultura elaborada con material reciclado que ya se ubica en los jardines del Edificio Central de la institución académica.

La rectora del centro anfitrión, Rosa Aguilar, señala que las dos entidades convocantes firmaron en 2017 un protocolo general de actuación del cual surgieron algunos proyectos de investigación, como uno del área de ingeniería industrial para conocer cómo afecta la contaminación acústica en los cetáceos, liderado por el profesor Fernando Rosa, y otro del grupo de zoología sobre mamíferos marinos, liderado por el profesor Alberto Brito.

Además, la ULL forma parte, junto a la ULPG, del proyecto CanBio, que Loro Parque Fundación, en colaboración con el Gobierno de Canarias, financia con dos millones de euros con el fin de estudiar durante cuatro años el cambio climático en el mar, la acidificación oceánica y sus efectos en la biodiversidad marina de Canarias y la Macaronesia. La Fundación también colabora con la ULL, en calidad de mecenas, en una convocatoria que premia los mejores trabajos fin de grado de la rama de ciencias y que "suponen un aliciente para que nuestro alumnado dirija sus trabajos finales de grado hacia materias comprometidas con la conservación medioambiental", apunta Aguilar. "En nuestro Plan de Gobierno hay además una veintena de medidas directamente relacionadas con la sostenibilidad", agrega.

Tras la entrega de unos galardones otorgados por Loro Parque Fundación ha sido inaugurada la escultura elaborada con material plástico recogido de las playas de la isla. Inspirada en la obra del artista grancanario Néstor Martín-Fernández de la Torre ha sido montada por Paolo Bonano, quien ha utilizado ha utilizado latas, botellas y tapas de plásticos.

Por otro lado, la Universidad de La Laguna lidera IMPLAMAC, un proyecto de investigación internacional que evaluará hasta 2022 el impacto de los microplásticos y contaminantes emergentes en costas de la Macaronesia. Con un presupuesto de, aproximadamente millón y medio de euros en esta iniciativa participan seis universidades y centros de investigación de Canarias, Azores, Madera y Cabo Verde. Ha sido presentada en la Sección de Química de la Facultad de Ciencias de la Universidad de La Laguna.