Cáritas Diocesana de Tenerife, a través del Fondo Social Europeo, y la Fundación Mapfre Guanarteme promueven la inserción laboral de 41 personas en vulnerabilidad social de la isla dentro del Proyecto Mila. En la última edición de la iniciativa, iniciada el pasado enero, han sido atendidas 238 personas, de las cuales 102 realizaron formaciones y las mencionadas 41 lograron la inserción laboral.

Los Itinerarios Personalizados de Inserción ofrecen un enfoque integral. El objetivo es que el participante se sienta orientado, acompañado, motivado y reforzado en todo su proceso de búsqueda activa de empleo. Cáritas los impulsa con el Programa Operativo de Inclusión Social y Economía Social (POISES) integrado en los mencionados anteriormente.

El perfil de las personas con las que se trabaja, representa un reto, ya que en la mayor parte de los casos están en una grave vulnerabilidad social y su problemática no se reduce a la falta de empleo, sino en una serie de condicionantes que agravan y limitan su situación.

Muchas llegan a Mila derivadas desde los servicios de atención de base y cobertura de necesidades básicas de Cáritas por el riesgo de pérdida de su vivienda habitual, con problemas burocráticos por su condición de demandantes de asilo, sin ningún tipo de ingresos y que subsisten gracias a las ayudas sociales, con largos periodos en desempleo o sin su primera oportunidad en el mundo laboral.

Cáritas desarrolla estos Itinerarios Personalizados desde hace más 20 años. El pasado, 2018, 1.764 personas participaron en el Programa de Empleo. De ellas, 724 recibieron formación (el 44%) y 351 (el 23%) lograron insertarse en el mercado laboral. La entidad está en contacto con unas 260 empresas.