El menor que asegura haber sufrido abusos sexuales por parte de su fisioterapeuta relató ayer que no contó lo sucedido a nadie porque le daba vergüenza y se sentía "humillado". La víctima manifestó que acudió cinco veces al local del procesado y que, a partir de la tercera sesión, el investigado "fue a más".

En el juicio que se llevó a cabo en contra de J. G., de 59 años, por, presuntamente, masturbar y realizar felaciones a un menor de 12 años en el año 2013, la víctima declaró que decidió acudir a este quiromasajista por recomendación de su madre, ya que él jugaba al tenis y sufría contracturas de forma constante. "Yo nunca había ido a un fisio. En las dos primeras sesiones todo fue normal, pero, a partir de la tercera, comenzó a pedirme que me quitara el calzoncillo". "También me decía que estábamos entre hombres y no pasaba nada", aseveró el joven, que ahora tiene 18 años.

Asimismo, el afectado manifestó que desde la tercera hasta la quinta sesión, el investigado le practicó felaciones y lo masturbó. "Yo también se lo hacía a él, porque me decía que era algo normal", lamentó la víctima.

"Él me preguntaba si yo tenía pareja, si me masturbaba y que si sabía lo que era el 69", explicó el joven que, tras la quinta sesión, preferió dejar de ir al consultorio del acusado, aunque sus padres le animaban para que acudiera, ya que tenía dolores por las contracturas.

Cinco años después, el afectado accedió a contar todo lo que, supuestamente, le había ocurrido, a raíz de dos mensajes de texto que le llegaron por su 17 cumpleaños. "En 2017, él me envió un WhatsApp en el que me felicitaba y me ofrecía un bono de masaje gratis, yo lo bloqueé de inmediato. En el 2018 me escribió un mensaje de texto también por mi cumpleaños, en el que me ofreció lo mismo. Al día siguiente me recordó que tenía el masaje gratis y las horas en las que podía acudir", reveló el afectado.

El joven explicó que se puso "nervioso" cuando le llegó el mensaje del procesado y que su novia comenzó a preguntarle por ello, por lo que decidió contarle que cuando tenía 12 años el quiromasajista abusó sexualmente de él mientras le hacía los masajes.

Por su parte, tanto la novia, como la madre y la suegra del joven relataron que este les contó los abusos de manera general y que además pidió a la Policía entrar solo a presentar la denuncia. "Pidió que yo no estuviera presente cuando él prestara declaración, por lo tanto es probable que no me haya contado todo lo que sucedió", aseguró la progenitora entre sollozos.

"A mí nunca me invitó un masaje". "Yo llevaba años visitando el centro, incluso la última vez que acudí a la consulta con el hijo del acusado fue unos días antes de que mi niño recibiera el mensaje", apostilló la madre de la víctima.

El acusado negó todo y declaró que desconocía las razones por las que el joven lo acusaba de cometer estos "falsos hechos". "La puerta de mi consulta suele estar sin seguro, cualquier empleado puede entrar a ella cuando quiera, incluso mientras yo esté atendiendo a un cliente", resaltó el procesado.

Con respecto a los mensajes que le envió a la víctima por su cumpleaños, el investigado aseveró que eso "forma parte de la comunicación corporativa que tiene la empresa con sus clientes y que se hace con todos por igual".

"Llevo cuarenta años tratando con menores, actualmente hay 4.631 pacientes en mi centro y nunca he tenido un problema con ellos", enfatizó el acusado.

Varios testigos de la defensa coincidieron en que, tanto ellos como el resto de su familia, eran clientes habituales del encausado y "nunca" han tenido quejas.

Otro joven relató que, en la primera consulta, acudió solo y que J. G, le apartó el pene y le apretó los testículos, algo que le pareció extraño, por lo que no volvió a entrar solo a la sala de masajes con el investigado.

La Fiscalía solicita 11 años de cárcel para el acusado por un delito de abusos sexuales a menores de 16 años, al considerar que quedaron acreditados los hechos. Mientras que el letrado de la defensa, Manuel Pérez Toledo, pidió la libre absolución tras recalcar que "no existen pruebas" y que se trata de una "denuncia falsa". De esta manera el juicio quedó visto para sentencia.