El Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, en Tenerife, ha incorporado la cirugía endocrina de glándula suprarrenal a su catálogo de prestaciones quirúrgicas mediante el robot Da Vinci e inicia así la tercera fase del Programa de Cirugía Robótica implantado este mismo año.

Esta nueva vía de abordaje mediante cirugía robótica ofrece numerosas ventajas, señala el comunicado, como efectuar con mayor precisión y seguridad la operación de la zona afectada.

De este modo se reduce el riesgo de lesiones de las zonas colindantes, como el riñón, la arteria y la vena renal y permite una recuperación más rápida del paciente y un menor tiempo de hospitalización.

La cirugía robótica da Vinci es uno de los últimos grandes avances de la medicina en el ámbito quirúrgico, pues con ella se combina la técnica laparoscópica convencional con tecnología robótica de precisión milimétrica y la imagen en 3D.

El robot quirúrgico Da Vinci Xi del Hunsc consta de tres grandes unidades, por un lado se encuentra la consola ergonómica del cirujano que es considerada el centro de mando del sistema Da Vinci.

Está diseñada para ofrecer comodidad al profesional que maneja los mandos del robot, en contraposición con las posturas que se adoptan en las técnicas laparoscópicas convencionales y los movimientos que efectúa el profesional en la consola quirúrgica son digitalizados y modificados por el sistema informático del robot.

De este modo, se eliminan temblores por lo que se facilita al cirujano un mayor campo de acción y una intervención precisa durante la operación.

El segundo elemento técnico es el carro quirúrgico, responsable de realizar técnicamente la operación sobre el paciente y cuya función principal consiste en sostener los 'brazos' del equipo donde se encuentra instalado el instrumental.

En este sentido, agrega el comunicado, el personal de enfermería cumple un papel fundamental, pues ayuda al cirujano que está en la consola con el intercambio de instrumental y de endoscopios, así como en otras tareas en la zona del paciente.

La torre de visión es el último gran componente del robot quirúrgico, en la que se aloja tanto el equipo de visualización en imagen 3D como el procesamiento central del sistema.