El huracán Lorenzo creció durante el día de ayer muy rápidamente. Si durante la mañana del jueves se concebía como un huracán de categoría 2 en la escala de Saffir-Simpson, una vez cayó la noche empezó a ser catalogado con la categoría 4 (de las 5 que existen en esta clasificación).

Con vientos que alcanzaron en el día de ayer los 215 kilómetros por hora, se concibe como uno de los huracanes "más grandes y potentes" que ha vivido el centro del océano Atlántico desde que se analizan este tipo de fenómenos. Así lo describió el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, que lo comparó con el Gabrielle, sucedido en el año 1989. Según las primeras previsiones, parece que el huracán avanzará hacia la vertiente noroeste y podría afectar en algún momento, aunque difícilmente, a las islas Azores. Sin embargo, salvo cambio de ruta, no está previsto que llegue a tocar directamente al Archipiélago canario. El propio Centro Nacional de Huracanes comentó en el día de ayer que el huracán no afecta ni lo hará en el futuro a ninguna costa, según sus previsiones.

No obstante, aún es pronto para afirmar si Lorenzo llegará a visitar las Islas, pues en el comportamiento de los huracanes puede llegar a ser errático. Por el momento, parece que los canarios vivirán, con suerte, este suceso desde la distancia.