Pasapalabra evoluciona en la búsqueda de nuevos seguidores para su programa . El concurso más famoso de Telecinco puso en marcha un nuevo método para hacer el formato aún más participativo. Se trata de utilizar Twitter para que los espectadores puedan contestar a al menos dos de las 50 palabras que componen el rosco, el momento más especial del programa en el que los dos concursantes que ahora mismo luchan por el gran premio (Orestes y Jero) contestan a las últimas preguntas del formato. ¿El objetivo? Mejorar la relación con el público y que el concurso sea más interactivo.

La mecánica es siempre la misma. Se quiere que los tuiteros intenten acertar las dos primeras preguntas del rosco primeras en las que los concursantes "pasen palabra". Para hacerlo los tuiteros tienen que utilizar el hastag "2 de 50". Desde el propio programa explicaron la mecánica del nuevo "concurso" en el que no hay premios y lo único que te llevas a casa es la satisfacción de haber acertad o. "En los próximos días iremos cambiando y afinando cosas y por supuesto esto no afecta nada al concurso habitual de la pista musical", afirmaron desde el formato.

Las reglas son muy básicas: tiene que contestarse todo en un tuit y tienes que ser el primero. Pero, como cada vez que hay un concurso en la televisión, este 2 de 50 de Pasapalabra también generó polémica. La de quienes dijeron haber sido los primeros pero no consiguieron el reconocimiento que creyeron merecer.

A través de iniciativas como esta en Twitter los programas diarios de televisión intentan ganar nuevos espectadores en un mercado cada vez más colapsado. No en vano cada vez hay más competencia. Los Lobos de Boom, el grupo de cuatro amigos que desde hace dos años concursa en las tardes de Antena 3, no se lo están poniendo nada fácil. Su desparpajo ha conseguido ganar a mucho público.

Hubo quién incluso abandonó Pasapalabra después de que se fuera Fran González, el crack asturiano del rosco al que seguían miles de personas y que llegó a conseguir batir récords logrando que su rosco se convirtiera en el minuto de oro del día y reuniera delante de una pantalla a más de cuatro millones de personas siendo, por lo tanto, lo más visto del día en cualquier cadena en abierto de ámbito nacional. Un logro a la altura de muy pocos que desde luego no se ha vuelto a conseguir.