De las gestas galas a las gestas españolas. Del Loira a Toledo. Al patriótico grito de "¡Viva España!" comienza cada función de 'El sueño de Toledo', el grandioso montaje francés sobre la historia de España repleto de leyendas impulsado por Puy du Fou, la empresa creada hace más de 40 años por el intelectual Phillippe de Villiers en la región del Loira. El estreno de la versión española congregó el pasado 30 de agosto en la ciudad de las tres culturas a más de 4.000 espectadores que disfrutaron desde las gradas durante 75 minutos de un recorrido nocturno por una historia que nace con la conversión al cristianismo del rey visigodo Recaredo y concluye pasando de puntillas sobre el trágico comienzo de la Guerra Civil en 1936.

Casi 15 siglos de avatares en un escenario de 3.900 metros cuadrados a ocho minutos del centro de Toledo por el que pasan más de 2.000 personajes representados por 185 actores, jinetes que cabalgan en blanquísimos equinos sevillanos, acróbatas que danzan incansables entre el agua que representa al río Tajo y cientos de imágenes lanzadas por potentes videoproyectores. La música de la Orquesta Sinfónica de Londres acompaña a los artistas con dispares partituras moriscas, judías y cristianas que se unen al final en una delicada armonía.

Pero el éxito de esta empresa decidida a tocar el corazón de los españoles representando sus historias y leyendas no ha sido ni de lejos un camino de rosas sin espinas. La inversión francesa de más de 200 millones de euros en este secarral manchego estuvo paralizada sobre todo por la feroz oposición de los grupos ecologistas contrarios a intervenir en un terreno de 30 hectáreas que a partir de 2021 acogerá cuatro nuevos espectáculos diurnos de media hora cada uno y la recreación de tres pueblos, uno medieval, otro de artesanos y un campamento morisco. "Hemos logrado convencer a los que rechazaban este proyecto llevándoles a Francia para que comprobasen que por encima del espectáculo está nuestro amor por la naturaleza y el medio ambiente", explica David Nouaille, director general adjunto de la empresa gala que revela que ya han invitado a Felipe VI y a Letizia a disfrutar con sus hijas del show.

"Queremos que el espectáculo alimente el alma de los que nos visitan", proclama Nicolas de Villiers, uno de los siete hijos de Phillippe y presidente de Puy du Fou para quien en sus montajes no hay cabida para el adoctrinamiento. Su propósito declarado es rescatar unos hechos históricos para unir a los españoles con gestas incomparables como el descubrimiento de América. La emersión de una de las carabelas de Cristóbal Colón del escenario cubierto de agua es uno de los momentos estelares de este viaje a través de los siglos que destaca en un guiño hacia la mujer el papel de la comunera María Pacheco llamando a la sublevación contra Carlos V y, sobre todo, la lucha de las españolas contra la invasión napoleónica.

El acceso a la grada de 'El sueño de Toledo' bulle con 'El Arrabal', un espacio gastronómico ambientado en la Edad Media con platos castellanos que dan la bienvenida a los espectadores. "Este parque dedicado al entretenimiento no solo va a ser un revulsivo para Toledo sino para toda la región", proclama entusiasmado Adolfo Muñoz, el chef toledano gurú de la comida saludable, Premio Nacional de Hostelería en 2013 y firme embajador de Puy du Fou. En sus restaurantes de la ciudad de las tres culturas Muñoz idea sabrosas recetas vinculadas al espectáculo dispuesto a aprovechar la ocasión para invitar a los visitantes a disfrutar de los manjares y vinos manchegos.

El empresario Diego Ortega coincide con la euforia del locuaz chef, en uno de sus hoteles, el Eugenia de Montijo, en pleno centro toledano, un coqueto establecimiento cargado de recuerdos de aquella granadina que se convirtió en emperatriz precisamente de los franceses tras su boda con Napoleón III y que pasaba largas temporadas en este edificio para huir del boato de la corte parisina. "Organizaremos desde aquí paquetes especiales para poder asistir al espectáculo", anuncia Ortega.

"Por este escenario va a pasar de nuevo la grandiosidad de aquel Toledo capital de España", se envalentona el presidente de Castilla-La Macha, Emiliano García Page, convencido de que Puy de Fou se afianzará como una gran atracción turística. Los franceses ya han vendido más de la mitad de las 60.000 butacas disponibles esta temporada que finalizaba el 26 de octubre pero que ya han decidido ampliar. El precio de la entrada oscila entre los 24 y los 30 euros y las representaciones son los viernes y los sábados.

Los jóvenes actores, jinetes y acróbatas que participan en 'El sueño de Toledo' iniciaron su entrenamiento en el parque del Loira donde tuvieron que pasar duras pruebas de resistencia, baile, combate y acrobacia. "Al llegar a Francia sentí vértigo por la espectacularidad de sus puestas en escena", confiesa tras la actuación Adrián Padilla, especialista de cine que dejó la exitosa serie 'La Casa de papel' para embarcarse en la creativa idea de Puy du Fou avalado por su experiencia en esgrima clásica y japonesa que ha tenido que aprender a marchas forzadas la técnica de la esgrima medieval para combatir contra los moros. "No siempre hacemos el mismo papel", explica exhausto Padilla.

"Queremos gente con ganas de aprender, personas dispuestas a salir de su zona de confort para actuar en este show que tanto ha emocionado a los espectadores que ya lo han visto", explica David Nouaille, el director general adjunto de Puy de Fou en España que se crió en el parque francés junto a su madre, una de las amazonas de los espectáculos creados hace más de 40 años. "A los siete salía a escena en 'La Cinéscénie' y a los 15 ya era, como mi madre, jinete", rememora.

"Quiero que viváis en concordia", proclama Alfonso VI, aliado del rey de la taifa toledana Al-Mamúm, al llegar a la ciudad imperial llamada entonces Tulaytula y comprometerse a respetar las tres religiones: católica, judía y musulmana. Casi al mismo tiempo se proyecta la construcción de la catedral toledana. La recreación del monasterio de San Juan da la bienvenida a Isabel La Católica, exultante tras haber unificado a los pueblos de la Península. "Por fin se ha cumplido mi sueño", celebra de la mano de Cristóbal Colón, el navegante genovés que trae a España el oro de América pero también unas costumbres nuevas y ropajes llenos de color y plumas que danzan sobre el escenario para evocar la frondosidad de las tierras descubiertas.

La genialidad de Miguel de Cervantes y su don Quijote, Lope de Vega, Calderón de la Barca y El Greco ensalza 'El Sueño de Toledo' antes de la invasión napoleónica cuyo combate con los españoles se escenifica melódicamente a golpe de flauta. Una España pobre y eminentemente rural alejada del progreso de otros países europeos emerge en los últimos minutos del show para dar paso a un siglo XX más risueño con la llegada del ferrocarril a Toledo apadrinado por Alfonso XIII.

Una de las bailarinas rompe esta ilusión al referirse apesadumbrada al inicio de la Guerra Civil para concluir la función con una breve alusión a las comunidades autónomas representadas por chicas ataviadas con sus trajes típicos y una espectacular explosión de fuegos artificiales.