El director general de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), Antonio María Ávila, aseguró que desde el Gobierno de Canarias, sin concretar cuándo o quién, se pidió que se corrigieran aquellos libros de texto que dicen que en las islas hay ríos.

Asimismo, contó que en algunos libros se señala que en el archipiélago hay ríos que tienen importancia como lugares de asentamiento humano o como vías de comunicación, por lo que el Ejecutivo regional solicitó que "desaparecieran" este tipo de frases. Durante una rueda de prensa conjunta con la Asociación Nacional de Editores de Libros y Material de Enseñanza (ANELE) celebrada en Madrid, Ávila explicó que todas las comunidades autónomas presionan personalmente a los editores de libros de texto mediante "mecanismos bastardos" para modificar o incluir contenidos.

"Los políticos presionan y además utilizan mecanismos bastardos para que los libros digan lo que ellos quieren que se diga y no lo que la ciencia dice", denunció. Según el director de la FGEE, los editores de libros de texto reciben "presiones personales" de consejeros de Educación y directores generales autonómicos. Ávila evitó los detalles y no mencionó nombres concretos, pero expuso varios ejemplos de diferentes comunidades autónomas. Por ejemplo, aseguró que "políticos" de Cataluña "quieren que hablemos de Wilfredo el Piloso -que fue Conde de Barcelona en el siglo IX- y no de los Reyes Católicos" o aludir a la "corona catalanoaragonesa" en sus libros.

Del mismo modo, acusó a la Generalitat Valenciana de "censurar a un director de la Real Academia" como el fallecido filólogo Fernando Lázaro Carreter porque, según el relato de Ávila, afirmaba que el valenciano era un dialecto del catalán.