El 4 de noviembre de 2017 Gran Hermano anunció la expulsión de uno de sus concursantes, el murciano José María , por "una conducta intolerable". Pocos días después, salió a la luz que la decisión de la salida del vecino de Torre Pacheco vino tomada por un supuesto abuso sexual durante una fiesta a su compañera Carlota, con la que mantenía un romance en la casa de Guadalix de la Sierra. La dirección del programa decidió denunciarlo ante la Guardia Civil y la joven hizo lo propio

Hace unos días el Confi TV, la sección de televisión del diario El Confidencial, habló con Carlota, quien ha roto su silencio años más tarde y ha explicado lo que ocurrió esa noche. La joven confirma que se encontraban de fiesta en la casa y que tomó "cuatro chupitos". "Lo último que recuerdo bien es estar en la cocina", apunta.

Carlota, a la que le resulta "imposible" decir el nombre del pachequero y al que se refiere como "esa persona", cuenta que a la mañana siguiente de que ocurriera el presunto abuso ella no era consciente de lo sucedido y actuó con normalidad con José María. "Decidieron dejarlo no sé cuantísimas horas a mi lado cuando tenían pruebas suficientes como para sacarlo inmediatamente, permitieron que se riera en mi cara al decirme que me cuidó".

Cuando a las horas expulsaron a José María, la joven pensó que "se trataba de una broma", pero le dijeron que se tranquilizara, "que tenía que ver unas imágenes". "Y en ese momento me pusieron el vídeo con lo que sucedió esa noche, sin avisarme de lo que estaba a punto de ver", se queja la entrevistada, quien opina que debería haber estado a su lado un psicólogo.

Las imágenes de lo que sucedió aquella noche "duran casi 10 minutos y se ve perfectamente que se aprovecha de mí en la habitación y que yo estoy inconsciente", continúa Carlota el relato.

"Dos compañeros de la casa llegaron a entrar en el cuarto para ver cómo estaba y él les echó diciendo que yo estaba muy mal, pero que me estaba cuidando". La joven asegura que si hubiera estado consciente no hubiera pasado, pero que no se pudo defender. "Es que incluso se ve cómo se ríe de mí después de hacerlo. Se ve cómo la 'Super', porque esa noche era una mujer la responsable de la casa, me llama y yo no respondo porque estoy inconsciente", explica a El Confidencial.

Carlota no entiende como la dirección del programa permitió que eso ocurriera y no actuó en el mismo momento.

Más tarde, se encontró con el murciano y asegura que él "acabó admitiendómelo".

Ahora, la joven está ayudando a su familia con su negocio, "en tratamiento psiquiátrico y psicológico, tomando medicación, evitando muchas veces incluso salir a la calle sola...". Solo pide que se haga justicia y que "no sigamos normalizando estas atrocidades".