El galardón concedido a Catalina Ruiz Pérez en el año 2017, Premio Canarias de Investigación e Innovación -la primera mujer en recibirlo-, reconoció una amplia trayectoria volcada en la investigación científica y la docencia en la Universidad de La Laguna (ULL). Su trabajo se dirigió a ámbitos como la nanotecnología, la cristalografía o el magnetismo molecular. Muy crítica con los recortes aplicados a la ciencia tras el advenimiento de la crisis, su voz se alzó para reivindicar el lugar que debe corresponder a la investigación en una sociedad que quiera producir conocimiento. El DÍA reproduce esta entrevista, realizada en 2017 con motivo de su elección como Premio Canarias de Investigación, después de que ayer falleciera a los 62 años en Valencia por una enfermedad.

El Gobierno canario premia su labor como investigadora. ¿Nuestras instituciones entienden lo que significa la investigación científica y la dimensión que debe tener?

Yo creo que el Gobierno canario sí lo ha entendido. Otra cosa es que en ocasiones no la apoye como a mí me gustaría. Al igual que el Gobierno central, en ocasiones, a la hora de los recortes, pone en un lado temas como la salud y la educación y en otro el dar dinero a la investigación, cuando en realidad no se deberían situar en dos ámbitos diferentes.

Usted ha sido muy crítica con los recortes a la ciencia ocasionados por la crisis. ¿Tan fuerte ha sido el hachazo?

El hachazo ha sido mucho más fuerte de lo que se ha dicho. No sólo es un hachazo que afecta al momento en que ocurre, en el hecho de que dejas de tener dinero. El problema es que las consecuencias de lo que no haces en un determinado año, igual no se ven entonces, pero sí en anualidades posteriores. Ahora la crisis no se ve tan grave porque hubo unos años de mucha productividad, en que se invirtió en recursos humanos y de investigación. Pero llegará un momento en el que se va a notar mucho más.

¿Es cierto que están volviendo los investigadores que emigraron forzados por la crisis?

Es cierto que hay investigadores que están volviendo, que se fueron fuera y que ahora intentan volver. También hay otros que han decidido quedarse o que no pueden volver. Yo creo que el que te vayas es bueno, es ver como se trabaja en otro sitio, conocer la investigación en otros lados, es implementar lo que tú haces. El problema no es que te vayas, es que tú país no te da la oportunidad de volver.

¿La investigación científica en Canarias ha alcanzado un nivel competitivo?

Creo que sí, que tiene un nivel internacional, aunque esto se da en grupos aislados. Realmente se necesita un apoyo mayor. No se puede hacer buena ciencia sin recursos. Es muy difícil. Muchas de las cosas se proponen a coste cero. Y a coste cero no se pueden hacer determinadas cosas.

En nuestro mundo, ¿debe ser el científico también un divulgador?

A los científicos se nos está pi-diendo que seamos empresarios, divulgadores... Se nos está pidiendo que seamos multitarea. Yo creo que hay gente que sabe divulgar muy bien y gente que no tiene esa facilidad, porque para llegar a los demás tienes que ser buen comunicador. Sería bueno que las instituciones tuvieran un buen equipo de comunicación. Los investigadores intentamos hacer lo que podemos, unos con más éxito y otros con menos: damos conferencias en colegios, en institutos, participamos en actividades que ponen en marcha los ayuntamientos, el Gobierno canario, la Agencia Canaria de Investigación...

¿Qué le parece una actividad como Pint of science, que acerca la divulgación científica a los bares?

Me parece una idea buenísima. Son cosas más abiertas, más informales, y funcionan muy bien. La gente al principio se sentía sorprendida cuando alguien se levantaba y se ponía a hablar, pero luego funcionó súper bien. Muchos preguntaron que por qué no se hacía más a menudo. También es cierto que lo llevaron a cabo muy buenos comunicadores, y eso influye.

¿El tejido científico de las Islas mantiene una relación fluida con el tejido empresarial que pueda aprovechar lo investigado?

Hay de todo. Nuestro tejido empresarial está formado fundamentalmente por Pequeñas y Medianas Empresas, muchas de ellas con una estructura de apenas dos o tres trabajadores. El tipo de actividad de investigación que pueden hacer es relativa en base a ese tamaño medio de la pymes. Por eso puse en marcha una plataforma tecnológica, que es un modo de que las empresas, sean más grandes o pequeñas, estén en estrecha relación con los investigadores. Hemos desarrollado proyectos muy interesantes con empresas canarias a través de esta plataforma. Se habla del desplazamiento de las humanidades en la universidad en favor de carreras técnicas y científicas.

¿Es cierto que se está dando ese proceso?

Carreras como física no la eligen muchísimos alumnos. Así, nosotros, a la hora de tener posibilidad de recursos humanos, lo tenemos mucho más complicado que las carreras de Humanidades. Y a la hora de competir en proyectos de investigación, competimos cada uno en nuestra área. No es cierto que las universidades estén sesgadas hacia las áreas de ciencias. Lo que ocurre es que nuestros alumnos muchas veces encuentran más fácilmente trabajo, se ven más directas las salidas profesionales, sobre todo en esta época. Así, parece que las universidades apuestan más por esa área, pero a la hora de plazas o recursos humanos no es así, porque se va más al número de alumnos. Por otro lado, nosotros conseguimos dinero fuera, y ahí compiten los de letras con los de letras, los de ingeniería con los de ingeniería, los de ciencias con los de ciencias y los de salud con los de salud. Buscamos recursos externos y eso la parte de ciencia lo ha hecho desde siempre, mientras que en humanidades hay sectores que no lo han hecho, pues se dan cosas más locales y eso lo hace más complicado.

¿Se aprovechan sinergias de investigación entre las universidades canarias y con entidades como el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC)?

A nivel institucional hay relaciones. Luego los investigadores funcionamos a través de relaciones de grupos con otra institución. Yo participo en un proyecto importante que lidera Las Palmas. No podría decir si esto lo hacen muchos o pocos grupos. El mío trabaja con el ITC en temas de agua. Además, tenemos bastante relación con otras instituciones canarias además de nacionales e internacionales.