El consejero de Administraciones Públicas, Presidencia y Justicia, y portavoz del Gobierno canario, Julio Pérez, aseguró ayer que "parece muy probable, no solo posible", que el Telescopio de Treinta Metros (TMT por sus siglas en inglés) se instale en la isla de La Palma si finalmente no se construye en Hawái, donde el colectivo de activistas nativos se opone frontalmente a esta obra por el lugar escogido para su construcción, la cumbre sagrada del volcán Mauna Kea.

La instalación de este telescopio en La Palma, apuntó Pérez en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, supondrá una inversión por parte de quienes lo impulsan de unos 1.300 millones de euros y la creación de unos 150 empleos directos de "alta cualificación", así como de "algunos cientos más de empleo indirecto". Por ello, expuso que el Gobierno de Canarias pretende "liderar y coordinar" a las administraciones implicadas para su instalación en La Palma, estudiar los pasos necesarios e impulsar el cumplimiento "rápido de los trámites pendientes y remover los obstáculos administrativos". Así, el próximo martes está previsto que se celebre una reunión en La Palma para resolver "lo que falte" y las "complicaciones administrativas".

Plena predisposición

Pérez ratificó la plena predisposición del Gobierno canario por apoyar la instalación del TMT en la Isla Bonita expresada el miércoles por el presidente, el también socialista Ángel Víctor Torres. "Apoyamos cerradamente que se construya el TMT en La Palma. Lo apoyan el Gobierno de Canarias, todos los grupos políticos del Parlamento, el Cabildo palmero y el Ayuntamiento de Puntagorda, y estoy convencido y seguro de que cuenta con el apoyo mayoritario de los canarios", manifestó el mandatario canario, quien aseguró que los puestos de trabajo que puede crear este telescopio son entre 500 y 600 directos e indirectos.

Los hawaianos, a favor del TMT

Mientras, en el archipiélago de Hawái, las obras para construir el TMT siguen paralizadas desde que el pasado 16 de julio comenzaran las protestas de los hawaianos. Y no hay esperanzas de que puedan retomarse. Es más, el bloqueo de los accesos al observatorio de Mauna Kea no solo han frenado estos trabajos, sino también las investigaciones de los 13 telescopios que se encuentran en este volcán sagrado, lo que ha disparado la preocupación de los científicos que desde allí observan el universo.

Lo curioso es que no todos los hawaianos están de acuerdo con este bloqueo. Todo lo contrario, el 64 por ciento rechaza las acciones de protesta de los activistas nativos y está a favor de que el megatelescopio de 30 metros se construya en su observatorio, según la nueva encuesta Civil Beat. Otro aspecto que muestra esta consulta es que a los residentes de las islas de Hawái tampoco les gusta cómo el gobernador David Ige ha manejado el problema de TMT.