El servicio de Nefrología del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria ha recordado que la diálisis peritoneal domiciliaria es la opción terapéutica sustitutiva para la enfermedad renal crónica que fomenta una mayor autonomía entre los pacientes, hasta que se trasplantan.

El centro hospitalario llevó a cabo casi 8.000 sesiones domiciliarias de diálisis peritoneal en 40 pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) durante 2018.

La diálisis es un proceso mecánico externo diseñado para sustituir la función de los riñones cuando estos se encuentran muy dañados y no pueden realizarla por sí solos, como es la filtración de las toxinas en la sangre y el exceso de líquido que no se elimina a través de la orina.

Este catéter permite al paciente conectarse con el dispositivo que realiza la diálisis instalado en su propio domicilio. Para ello, un dispositivo externo conectado al paciente a través de un catéter actúa como un riñón artificial, limpiando la sangre de impurezas a través de la diálisis. Se trata de una terapia que ocupa varias horas diarias y que constituye la principal opción terapéutica hasta que se realice un trasplante renal. Este proceso se lleva a cabo en los centros hospitalarios y también en el domicilio del paciente si cumple los criterios médicos establecidos.

El servicio de Nefrología del Hospital de las Candelaria cuenta, en primer lugar, con la Unidad de Enfermedad Renal Crónica para informar, asesorar y atender a los pacientes con esta patología durante todo su proceso. Este departamento se complementa con la Unidad de Diálisis Peritoneal creada para este tipo de pacientes y tratamiento sustitutivo.