El espíritu de TLP cada año supera los muros del recinto ferial. Cargados con maletas, ordenadores, sacos de dormir y casetas de campaña, los teleperos comienzan la convivencia a la que ya les predispone el evento, un día antes de lo normal. Para estos jóvenes, la mayoría veinteañeros, pasar 27 horas en los extramuros del evento es una forma de comenzar la fiesta un poco antes.

Aún quedando dos horas para que se abrieran las puertas oficialmente, la cola formada en el lateral del recinto ferial que mira a la refinería llegaba prácticamente hasta la sede de Turismo de Tenerife. Decenas de personas portaban sus equipos informáticos para pasar los próximos cinco días jugando con sus compañeros de clan. El sol dio una pequeña tregua a los participantes, que pudieron agolpar sus sillas y equipos en una gran franja de sombra.

Los primeros desde las nueve de la mañana del día anterior pasaban las últimas horas antes del gran momento jugando a las cartas o participando en las actividades propuestas por los voluntarios. A pesar del calor santacrucero, muchos se atrevieron a enfrentarse a los retos propuestos por la organización del evento -también conocidos como espontáneos- ya fuera por conseguir una de las monedas del evento, una summer-coin, o para conseguir un vasito de granizado. Durante la espera, otros participantes simplemente eligieron pasar el rato jugando a las cartas, charlando o acostándose en el suelo para descansar del madrugón.

Este año las summer-coins se han convertido en un reclamo para los participantes, ya que si obtienen bastantes podrán conseguir la reserva de una entrada o varias entradas para la próxima edición, así como otros premios. Es el caso de Rubén, que permaneció esperando en la cola desde las nueve de la noche del lunes. Según el participante, en TLP 2018 acudió a la Summer-con, donde consiguió ahorrar más de 800 monedas. Un premio que le permite por primera vez este año acudir al recinto con una acreditación diferente, la de participante.

"Empezar TLP el lunes ya es una tradición", explicó Daniel, que fue el primero en llegar a la cola a las 9 de la mañana de este día 15, cuando aún el evento no había empezado ni a ofrecer sus primeras charlas. También Daniel fue el primero en entrar en el recinto sobre las 12:20 de la mañana -unos 20 minutos después de lo previsto-. Pero no fue el primero en conseguir su acreditación pues la cantidad de cajas y maletas que portaba -y en las que guardaba su equipo- hizo que se retrasara su entrada provocando que algún que otro participante pudiera llegar antes hasta su puesto. Daniel, como otros teleperos, lo primero que hizo nada más llegar a su mesa fue colocar todo su equipo electrónico para sentirse como en casa. Después, como afirmó, se ducharía y dormiría un rato. Suficiente para no perderse más tarde el tradicional encendido de pantallas.

Todos los teleperos se mostraron expectantes acerca de lo que pasará durante esta semana. La mayoría espera que la organización les sorprenda, como ya es común cada año. Pero las redes sociales del evento también han ayudado a crear curiosidad en torno a las distintas actividades que ofrecerá este año TLP. Es el ejemplo de Andrea, que espera impaciente la Drag Race que se llevará a cabo como actividad nocturna el viernes en la Lan Party. También el de Juan y Alejandro, que aprovecharán el evento para disfrutar de algunas de las competiciones de eSports más importantes a nivel nacional, como el Circuito de Tormenta (League of Legends). Aunque Juan, por su parte, también se paseará por el stand de Just Dance, ya que se muestra gran fan del formato del juego de baile.

No fueron las 2.000 personas que anoche pasaron la noche por primera vez en el recinto las que se atrevieron a seguir comulgando con esta tradición, pero está claro que gracias a los que siguen llevándola a cabo, la acampada previa al evento ya se ha convertido en uno de los atractivos más conocidos de TLP Tenerife.