No tiene por supuesto nada que ver la experiencia vivida con la auténtica Larga Marcha, ese acontecimiento fundamental en la historia reciente de China, clave para iniciar la etapa de Mao al frente del gigante asiático. Pero permitan la licencia para ilustrar el encuentro que hace unos días con los montes de la isla, en concreto de la zona norteña de Taoro, como escenario tuvo lugar entre el colectivo local Montañeros de Nivaria y una representación de la cada vez más numerosa comunidad china en la isla. Fue una jornada de confraternización en la que el inicio con cierta separación lógica por el desconocimiento no tuvo nada que ver con un final en el que la treintena de personas, de todas las edades, de aquí o de fuera que participaron ya eran camaradas.
Chano Gil, presidente y fundador de Montañeros, lo cuenta: "En colaboración con la Oficina del Voluntariado Ambiental del Área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife subimos a los altos de Taoro para disfrutar de una ruta senderista entre el área recreativa de La Caldera y el pueblito del Mamio en el municipio de La Orotava". Añade Gil que "estuvieron invitados a la actividad miembros de la Comunidad China en Tenerife, a través de la Asociación Comercial y Turística China con Canarias Hua Shang Hui".
Al comenzar la actividad se realizó una suelta de aves provenientes de La Tahonilla, el Vivero Insular de Flora Autóctona, ubicado en la Carretera General de La Esperanza y que está dedicado a la producción de flora para la restauración ecológica, teniendo también a su cargo el cuidado y la recuperación de la fauna. En este caso, apunta Chano, "liberamos cernícalos que fueron curados en dicho centro al que puede acceder la población".
Desde Montañeros de Nivaria valoran como "un magnífico orientador a Francisco, asistente externo de la Oficina del Voluntariado Ambiental insular, dentro de un proyecto patrocinado por de Red Eléctrica. Nos explicó con detalle diferentes situaciones que se suelen dar en el monte y las herramientas que tiene el ciudadano para contribuir a la prevención de los incendios".
En el vivero de Aguamansa, continúa, "tomamos contacto con la Brigada Forestal (Brifor), recibiendo una información detallada del importante papel que juegan los agentes forestales durante el ejercicio de sus funciones como guardianes de la naturaleza y su imprescindible función en los incendios forestales. También ofrecieron ejemplos prácticos e incidieron en la labor que podemos hacer nosotros para colaborar en su extinción. Brillante y abnegada labor de estas personas que casi nunca salen en la primera línea informativa pero que, a pesar de ello, son imprescindibles".
Durante dos horas y media el grupo hispano-chino recorrió los 5,7 kilómetros de sendero singular La Caldera-Mamio-La Caldera
Chano explica la ruta: "Comienza y termina en el aparcamiento del área recreativa. Desde ahí recorre parte de la pista forestal de Mamio hasta llegar a la edificación conocida como Casa del Agua. Luego el recorrido desciende hacia el núcleo de Mamio por un entorno de fincas y parcelas cultivadas. Sube junto al barranco de Los Llanos en dirección a la carretera general y, tras pasar junto al centro ambiental de Aguamansa, entra de nuevo en el bosque para regresar".
Y resume para concluir: "Una experiencia muy grata".
