Un profesor de La Palma, Albano de Alonso Paz, que imparte clases en el instituto San Benito, de La Laguna, y una voluntaria de Icod de los Vinos, Natalia Díaz Martín, fueron los representantes de la provincia de Santa Cruz de Tenerife que recibieron a mediodía de ayer la Cruz al Mérito Civil de manos del Rey en un acto desarrollado en el Palacio Real. Felipe VI distinguió ayer a 41 personas representantes de diversos ámbitos de la sociedad con motivo del quinto aniversario de su llegada al trono. La distinción al docente estuvo fundamentada en el proyecto "El Español como puente", mientras que el reconocimiento a la joven se debió a su implicación en la ONG Manos Unidas. Además, curiosamente, Natalia fue la persona de menor edad que consiguió la citada condecoración.

El tercer canario que obtuvo la Cruz al Mérito Civil fue José Manuel Brito López, músico y director del proyecto Barrios Orquestados, en Las Palmas de Gran Canaria.

La mujer de Icod de los Vinos explicó ayer que se la han otorgado "por ser voluntaria de Manos Unidas, igual que se la podían haber concedido a cualquier otro joven solidario, que hay muchísimos en España". A sus 19 años, Díaz Martín se ocupa del archivo fotográfico de la ONG, aunque también imparte charlas y talleres en colegios sobre las actividades de Manos Unidas.

Su entrada en esta organización se produjo a la vez que empezaba su etapa en la Universidad de La Laguna, en octubre de 2017. Desde entonces estudia Magisterio Infantil y reside en dicha ciudad.

Los padres de Natalia proceden de San Juan de la Rambla y de Icod. Ella estudió en un centro concertado, en el Colegio del Buen Consejo de su municipio. Cuando estaba en Educación Primaria, cada año misioneros de varias partes del mundo acudían a las aulas de dicho complejo para exponer sus experiencias. Natalia reconoce que la entrega a los demás que relataban dichos religiosos influyó algo en que ahora haya decidido ofrecer parte de su tiempo libre a una ONG.

Y, cuando entró en la Universidad, acudió a unas jornadas de voluntariado y en su grupo había una colaboradora de Manos Unidas, que le habló de dicha ong de la Iglesia, que se dedica a impulsar el desarrollo en países de África, Asia o Latinoamérica.

Natalia dice que "creo en el trabajo para ayudar a los demás y me encanta que en esta ONG se respete a las personas que no son creyentes o practicantes, así como a las culturas y religiones de los países en los que interviene".

Dos maestros y otros tantos profesores, los primeros

Albano de Alonso Paz explicó ayer que "es importante que dos maestros y dos profesores hayamos sido los primeros en recibir la medalla". Según un comentario que le hizo un encargado de Protocolo, para Felipe VI, "la Educación es el pilar del Estado". Alonso estaba exultante y en el acto en el Palacio Real pudo departir con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "sobre los importantes méritos de Canarias y la relevancia de la cultura". Indicó que "para mí es un orgullo que el español de las islas, nuestro patrimonio y nuestra cultura sean distinguidos por la Casa Real". También pone en valor que se reconozca "la labor de un pequeño instituto de Tenerife, fiel reflejo de la diversidad que representamos en la escuela pública". Menciona también que en el proyecto El español como puente han colaborado tres profesoras de su centro, como son María Abreu, May Rodríguez y Ana Milagros, que han contribuido a diseñar muchas de las actividades de esa iniciativa con 70 alumnos de cuarto de la ESO. "Queremos convertir a nuestro alumnado en embajadores de la diversidad lingüística y cultural; ese es el legado más bonito que podemos dejarles para el mañana". De Alonso Paz también agradece el apoyo de la Dirección General de Innovación de la Consejería de Educación del Gobierno canario, con Teresa Acosta al frente. Sobre Acosta, señala que "es una persona cercana y muy preocupada por la implantación de un nuevo modelo de escuela basado en la diversidad".