No es extraño encontrar cernícalos que mantienen el equilibro en el delicado ecosistema canario. Agentes de la Medio Ambiente han encontrado dos pollitos de cernícalos caídos, sin ser capaz de encontrar su nido.

En La Tahonilla, los profesionales del área están alimentándolos a mano y enseñándolos a comer. El objetivo no es el de mantenerlos con vida en cautividad, más bien al contrario, tienen como objetivo en el plazo de 3-4 semanas enseñarles a defenderse en el territorio y que formen parte de los espacios naturales de la isla.