Agentes de la Policía belga y la Policía Nacional han detenido en Bruselas al hijo de la mujer que apareció muerta hace una semana en su domicilio de la Playa de Palma. El menor, de 16 años, había desaparecido poco antes de que encontraran el cuerpo de la víctima en el interior de un baúl cubierto con bolsas.

Los agentes belgas y los investigadores del Grupo de Homicidios, en virtud de una orden europea de detención y entrega emitida hace algunos días, también han detenido a la novia del hijo de la víctima, una chica de 17 años de la que tampoco se tenían noticias desde el mismo día. La autopsia determinó que Gloria Zavala, de 53 años, fue víctima de un homicidio. El avanzado estado de descomposición en el que se halló el cuerpo no permitió determinar cuál fue la causa de su muerte. Los forenses consiguieron datar su fallecimiento entre el viernes 10 y el domingo 12 de mayo.

La localización del hijo de Gloria Zavala se había convertido en una prioridad tras el hallazgo del cuerpo y determinar que se trataba de un homicidio. En primera instancia ya se había averiguado que se había trasladado al extranjero con su novia. En concreto, se habría instalado en Bélgica. Ahora los investigadores iniciarán las gestiones con las autoridades belgas para solicitar su extradición a España.

Los investigadores de la Policía Nacional están convencidos de que el hijo de Gloria Zavala está directamente relacionado con su muerte. De hecho su huida tras el fallecimiento de su madre y los resultados de la autopsia han multiplicado las sospechas del crimen sobre él. No se han encontrado hasta el momento en el cadáver lesiones externas mortales. Se está a la espera de nuevas pruebas Se está a la espera de nuevas pruebas que avalen el informe forense de la etiología homicida del fallecimiento.

De acuerdo con las pesquisas de los agentes del Grupo de Homicidios, el hijo de 16 años habría convivido al menos dos días con el cadáver de su madre en el domicilio situado en el número 278 Carretera Militar de la Playa de Palma. El hombre con el que compartían la vivienda se había ido unos días de viaje, por lo que el hijo y su novia se habrían quedado a solas con Gloria Zavala. Al parecer, el vástago colocó el viernes 10 de mayo un candado en el acceso al garaje. Allí se encontró el cadáver oculto en un arcón y metido en bolsas de plástico. Algunos testigos vieron al menor sangrar por la nariz.

Durante el fin de semana del 11 y el 12 de mayo, los vecinos oyeron numerosos ruidos y golpes en la vivienda de Gloria Zavala a horas intempestivas. Tras presentar una denuncia el martes a primera hora de la mañana por la desaparición de su madre, el hijo se marchó del domicilio con su novia. Algunos vecinos aseguraron que salió de la vivienda con una gran mochila.

Unas doce horas después, el compañero de piso llegó de viaje al domicilio del número 278 de la Carretera Militar. No encontró a nadie en la vivienda, pero un fuerte olor procedente del garaje le llamó profundamente la atención. Tras abrir un arcón, se encontró allí el cadáver de Gloria Zavala, cubierto con bolsas de plástico, y en avanzado estado de descomposición. A continuación avisó a la Policía. En torno a la una de la madrugada del miércoles 15 de mayo, agentes del Grupo de Homicidios y de la Policía Científica iniciaron la investigación de lo que ya entonces se perfilaba como un crimen.