Rosi Aguilar Chinea se se queda a tres puntos de ser rectora de la Universidad de La Laguna en la primera vuelta (48,2%), Gloria Rojas Rivero (27,1%) y Pino Caballero Gil (24,7%) le siguen de lejos en la votación, tras una intensa campaña electoral. En consecuencia, Rosi Aguilar y Gloria Rojas Rivero disputarán la segunda vuelta, el 28 de mayo.

Más de 22.000 miembros de la comunidad universitaria estaban llamados este lunes a elegir entre ellas tres a la sustituta de Antonio Martinón Cejas. Las tres son catedráticas y con experiencia más que demostrada en docencia, investigación y gestión durante casi tres décadas de presencia en la institución académica.

Durante estos días, Pino, Rosi y Gloria han empleado, en mayor o menor medida, la propaganda electoral. En una doble vía. Por un lado, la tradicional, con la pegada de carteles -no demasiados-, visitas a las distintas facultades, encuentros con los sectores de la comunidad educativa -docentes, alumnado y PAS- y un único debate, el organizado por Alumni ULL. Pero también han utilizado, en relación directa con el mensaje reiterado de renovación imprescindible, las nuevas tecnologías y la presencia en redes sociales. Apoyar la investigación y renovar la pantalla de docentes con un gran porcentaje a punto de jubilarse; atender al estudiante con canales de comunicación y mejora de titulaciones, incluidas la creación de otras nuevos, o consensuar con el PAS una nueva RPT. Son algunos de los asuntos que deberá afrontar la rectora que salga de las urnas. Otros dos conceptos fundamentales, o mejor tres en los que Pino, Rosi y Gloria han coincidido. En primer lugar, el profundo sentido público de la ULL que precisa en paralelo una financiación adecuada. Y la independencia de la institución de cualquier injerencia de poderes fácticos, económicos o políticos. El diagnóstico también es parecido. Hay dificultades y cierto desánimo, pero grandes potencialidades para conectar de verdad con la sociedad canaria y recibir recíprocamente su impulso.