La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha recomendado este jueves evitar la exposición prolongada al aire exterior ante la posible presencia de calima.

Asimismo, sugiere mantener las ventanas cerradas y no realizar esfuerzos físicos al aire libre.

El polvo en suspensión contribuye a resecar las vías respiratorias, y en muchas ocasiones se puede provocar un agravamiento de afecciones o síntomas relacionados con enfermedades respiratorias, tales como el asma, personas con enfermedad obstructiva crónica (EPOC) que hacen que aumenten las visitas a los servicios de urgencias y los ingresos hospitalarios en algunos casos, ha detallado Sanidad en un comunicado.

La exposición a este contaminante puede producir molestias torácicas, tos, palpitaciones, fatiga o incremento a la susceptibilidad a infecciones respiratorias, al menos durante los cinco días posteriores al inicio del episodio.

Por ello, recomiendan a las personas sensibles a este tipo de episodios, como niños, ancianos y personas con enfermedades respiratorias o cardiovasculares crónicas, a no salir a la calle, realizar la limpieza de las superficies con el polvo con paños húmedos y mantenerse en ambientes húmedos e hidratarse.

Sanidad también desaconseja realizar ejercicios físicos en el exterior y detalla que, en caso de empeorar los síntomas respiratorios, llamar al 112.

Ante la previsión de incremento de temperaturas y posible presencia de calima en los próximos días, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Salud Pública, recuerda a la población las precauciones básicas que es conveniente tomar para evitar riesgos para la salud, especialmente en las personas más sensibles y frágiles, como enfermos crónicos, niños y mayores.

Entre las sugerencias, se encuentra beber mucha agua o líquidos sin esperar a tener sed, salvo si hay contraindicación médica, y evitar las bebidas alcohólicas, café, té o cola y las muy azucaradas.

También es conveniente evitar exponerse al sol a las horas de mayor intensidad de calor (entre las 11 y las 16 horas), haciéndolo preferentemente antes de las 11 o después de las 16 horas y, en las horas de más calor, colocarse en las zonas más frescas de las viviendas.