El emotivo abrazo entre Cristian, alumno del CEO Bethencourt y Molina, y Cande, discapacitada, selló ayer el encuentro entre ambos colectivos con el fondo de un mural desarrollado durante dos meses bajo la coordinación de Sabotaje al Montaje, seudónimo del artista Matías Mata. El resultado es Tenique 01, representación gráfica de esa unión que desde ayer queda para siempre en la calle Tadorna del barrio de Barranco Grande, al Suroeste de Santa Cruz. Las manos de la discapacidad unidas con tres palabras superpuestas: Inclusión, Diversidad y Visibilidad.

Yaiza Afonso ha liderado el proyecto de Cordicanarias, entidad que aglutina a personas con discapacidad física. Ayer estaba orgullosa porque se ha hecho realidad, con la financiación del IMAS municipal -la concejala del Distrito Suroeste, Gladis de Léon, representó en la inauguración al Ayuntamiento- esta idea. Su nacimiento y desarrollo los recrearon para El Día sus protagonistas.

Guayacent, Fran, Esther, Montse, Marta, Yazmina, Manuel, Dácil, Cande, Conrado y Toño, vecino del barrio, explicaron el origen: "Matías recogió las ideas y se basó en nuestras manos unidas que fotografió antes del primer esbozo".

Luego colaboraron todos. Los vecinos y la comunidad educativa del CEO, encabezada por su directora, María José Zamorín, y el dinamizador social Ruymán Afonso. Hasta llegar a acabar el mural.

Toño valora. "Espero que la gente lo respete porque es muy grande y especial. Hemos querido mostrar fuerza interior, nuestro día a día y esperanza". Por eso, Mata incorporó a su obra tres palabras: inclusión, diversidad y visibilidad.

Yaiza destacó el nombre, Tenique, un guiño a la cultura de los aborígenes canarios. Acabó con una frase de la escritora sordociega Hellen Keller para "abrir nuevas esperanzas en el corazón humano".

Mata valoró "el esfuerzo colectivo porque esto es de todos" y dejó claro que "he aprendido mucho de este proyecto participativo".

A partir de ahí se impuso la emoción. Primero, el vicedirector del CEO, Juan Carlos Gutiérrez, leyó el folleto editado para la ocasión Tan solo hace falta que te lo creas. Luego, cuatro alumnos -Dani, Cathaysa, Andrés y Nayade- leyeron versos de Gloria Fuertes y por último la directora entregó un simbólico corazón de fieltro a Matías Mata. Pero aún quedaba el epílogo. El alumno Cristian se soltó: "Felicidades a los discapacitados por ser tan luchadores". Cande, desde su silla de ruedas, aseguró ente lágrimas que "me han tratado como una basura y aquí me siento bien". Le prometió a Cristian un mandala y una pulsera amarillas, su color preferido. Su sentido abrazo puso un nudo en la garganta.

Ayer, día de la revolución portuguesa de hace 45 años, en Barranco Grande se dio un pequeño paso colectivo. En este caso con manos unidas en vez de claveles.

Colectivo "muy vivo"

Talleres de teatro y de radio, o la iniciativa de las lecturas en bibliotecas que concluyeron ayer mismo en el TEA. Incluso una película. Todo eso demuestra que Cordinarias se mueve. Ese documental titulado Soy y protagonizado por mujeres con discapacidad, se estrenó el pasado 27 de marzo y según anunció ayer Yaiza -Montse, simpática, auguró el camino al Óscar- una distribuidora se ha interesado. Yaiza hizo el guion, Juan Pedro Sabina lo dirigió con fotografía de Tarek Ode, música de Fernando Ortí y la canción final interpretada por Fabiola Socas.

El primero de una serie

La concejala Gladis de León valoró el mural: "Esta obra va a quedar para siempre físicamente aquí, pero también en nuestro interior porque está hecha con el corazón". Deseó que "este sea el primero de muchísimos más". Un día especial entre la rutina de otro cualquiera. Positivo. Aunque la otra cara fuera el vehículo que aparcó en el espacio reservado para contemplar el mural en su plenitud. La insolidaridad del conductor es mejor olvidarla pronto.