El experimento Quijote, que se encuentra instalado en el Observatorio del Teide (Tenerife), ha detectado una emisión anómala de microondas difusas que procede de la nube molecular Taurus. Este tipo de emisiones podría proceder de los primeros instantes del Universo, por eso, a partir de ahora la investigación deberá caracterizar las propiedades de polarización de estas emisiones tienen y analizar la polarización del fondo cósmico de microondas para la Cosmología.

Se piensa que este tipo de emisiones, que se detectaron por sorpresa por primera vez hace 20 años y que por eso fueron denominadas anómalas, están producidas por partículas de polvo muy pequeñas que penetran en el medio interestelar. La relevancia de estas observaciones reside en su potencial para combinarlas con otros experimentos, ya que permitirá una medición precisa de la emisión total asociada al polvo en rotación.

La nube molecular de la constelación del Toro (Taurus) es una de las regiones de formación estelar más cercanas y jóvenes donde podría producirse la denominada emisión anómala de microondas difusa. El descubrimiento se encuentra dentro del estudio realizada por un grupo de astrofísicos, liderados por el investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), Frédéric Poidevin. La investigación, realizada con el experimento Quijote, tiene dos objetivos principales. Uno de ellos es estudiar la polarización del fondo cósmico de microondas y el otro es detectar y caracterizar la emisión que nuestra propia galaxia produce en ese rango de frecuencias. Sus resultados permitirán saber realmente qué emisión procede de los primeros instantes del Universo. Las datos obtenidos forman parte del proyecto PolAME, cuyo objetivo principal es caracterizar el nivel de polarización (es decir, la orientación geométrica de las oscilaciones de la radiación) de las emisiones anómalas de microondas en las fuentes galácticas observadas. Este proyecto es importante tanto para la comunidad galáctica como para los cosmólogos. Para lograr su objetivo, el proyecto PolAME utiliza nuevos datos proporcionadas por el experimento Quijote.