El año 2018 se cerró con 298 casos de agresiones a sanitarios en el territorio español. Todos estos sucesos ocasionaron 322 víctimas, de las que prácticamente el 55% fueron mujeres.

La Policía Nacional realizó este balance ayer, momento en el que también explicó que durante ese año realizó 1.377 reuniones en todo el territorio nacional con el objetivo de evitar las agresiones contra los profesionales sanitarios. Además, organizaron 85 jornadas de prevención de agresiones mediante técnicas de contención verbal y escucha activa.

Según los datos estadísticos de las agresiones producidas, 2018 se cerró con un total de 298 hechos, siendo Andalucía la región con más casos, un total de 109. Todos estos sucesos ocasionaron 322 víctimas, de las que el 54,96% fueron mujeres, y destaca que la Policía Nacional ha esclarecido el 100% de los hechos. En este sentido, y teniendo en cuenta la evolución mensual de las agresiones, los meses de julio y agosto son los que registran más agresiones y el martes es el día de la semana más conflictivo. Por otra parte, las franjas horarias con mayores incidencias son las que oscilan entre las diez de la mañana y las doce del mediodía y a las 17:00 horas.

En este sentido, la Policía Nacional cuenta con la figura del interlocutor policial nacional sanitario, que se encarga de coordinar, cooperar, desarrollar y ejecutar las actuaciones relacionadas con cualquier manifestación de violencia o intimidación a personal sanitario. Esta figura, presente en distintos puntos de la geografía nacional, mantiene continuas reuniones con el sector sanitario para establecer una comunicación más fluida y adoptar las medidas de seguridad para disminuir el riesgo.