Los investigadores que, en 2008, detectaron en 219 miembros de una familia con 1.000 miembros vivos de la comarca sur de Gran Canaria una mutación genética que causaba la muerte súbita han anunciado este sábado que, diez años después, han cesado los fallecimientos.

Las novedades de este proceso han sido expuestas en un acto denominado "La muerte súbita en la comarca de Tirajana. Resultados y hallazgos clínicos en el último decenio'', y en él se ha destacado que gracias a este descubrimiento se ha "llegado a conseguir que no haya habido más muertes entre los familiares genotipados".

Los promotores del evento han precisado en un comunicado que los investigadores que hallaron la mutación, conocida como taquicardia ventricular catecolaminérgica familiar, fueron Fernando Wangüemert, cardiólogo director médico de Cardiavant, en Las Palmas de Gran Canaria, Josep Brugada, director médico del Hospital Clínic de Barcelona, y Ramón Brugada, director del Centro de Genética Cardiovascular de la Universidad de Girona.

Todos ellos fueron nombrados en 2011 con el título de Hijos Adoptivos del municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana por su contribución a la mejora de la salud de sus ciudadanos en el campo de la cardiología y la genética.

En el acto de este sábado se ha nombrado al presidente de la Fundación Canaria Umiaya para la Muerte Súbita, Carmelo Pérez, como cronista oficial de San Bartolomé de Tirajana por su esfuerzo y tarea en el ámbito de la genealogía a la hora de localizar a los familiares afectados.