La Fundación para la Educación Pública y la Formación en Cáncer (Fefoc), entidad privada sin ánimo de lucro fundada en 1996, ha creado el primer grupo de "Mujeres voluntarias contra el cáncer de próstata" para acompañar a sus parejas a sobrellevar esta enfermedad y sus secuelas.

Según explica el director científico de la Fefoc, Jordi Estapé, "está constatado que los hombres que sufren o han sufrido cáncer de próstata sienten más inquietud por poder desarrollar una vida normal, si bien adaptada a determinados efectos secundarios derivados del tratamiento, que por la propia supervivencia, dado que la mortalidad es relativamente baja".

Por eso, una de las intenciones es buscar la "solución psicológica" más allá de la curación".