La primera lluvia de estrellas importante del otoño es la de las dracónidas y a partir de hoy, si se busca un lugar oscuro, alejado de la contaminación lumínica, y si las condiciones meteorológicas lo permiten, ya se puede disfrutar.

Si bien está previsto que las dracónidas sean visibles las noches del 6 al 10 de octubre, su máximo se prevé para el próximo lunes 8.

Esta vez habrá luna nueva el día 9. Sin embargo se prevé que haya nubes en muchos puntos del país, sobre todo en Canarias, el norte peninsular y el Mediterráneo.

Las lluvias de estrellas se producen cuando la traza de partículas de polvo y rocas que dejan los cometas en su órbita alrededor del Sol entran en la atmósfera de la Tierra y se volatilizan produciendo un efecto luminoso: los meteoros.

Estos fenómenos se pueden prever con antelación, ya que todos los años la Tierra en su camino alrededor del Sol atraviesa la trayectoria de varios cometas; en este caso el cometa responsable de la lluvia de estrellas de las dracónidas es el 21P/Giacobini-Zinner.

El perihelio de este cometa -el punto de su órbita más cercano al Sol- fue el pasado 10 de septiembre, así que se podrían esperar más dracrónidas o giacobínidas -también se las conoce por este nombre por Michel Giacobini, astrónomo francés, descubridor de su cometa-.

Sin embargo, realmente no se puede saber y tampoco se puede hablar de un número exacto para su observación: fuentes astronómicas apuntan que estas estrellas fugaces son más lentas que otras y se podrían observar unas 4 o 5 por hora, si bien esto es variable porque en pocos minutos puede darse una mayor actividad y luego pasar un tiempo largo sin que se pueda ''cazar'' un meteoro.

Después de las dracónidas vendrán las leónidas, con un máximo previsto para el 17 de noviembre, y tras estas, las gemínidas, con una mayor actividad alrededor del 14 de diciembre.