Una investigación sobre la información genética de la población de Cuba ha revelado que en un 70 % procede de antepasados europeos, mientras un 20 % desciende de los africanos llegados como esclavos a la isla, un 8 % de aborígenes y cerca de un 2 % de chinos.

A partir de esos datos, resultado del estudio realizado por el Centro de Genética Médica del país caribeño, se ha llegado a la conclusión de que todos los cubanos son mestizos independientemente del color de la piel, indicó hoy la revista estatal digital Cubahora.

El estudio sobre el ADN de la población cubana ha permitido obtener información de unas 15 generaciones que se remontan a hace unos 500 años, según explicó la doctora en ciencias Beatriz Marcheco, directora del Centro Nacional de Genética Médica, perteneciente al Ministerio de Salud Pública.

Esa institución, creada en 2003, es referencia nacional del Programa Cubano de Diagnóstico, Manejo y Prevención de enfermedades genéticas y defectos congénitos, dirige la red de centros de genética médica del país y cumple tareas asistenciales, docentes y de investigación de la genética médica y la inmunología.

En el 81 % de los hombres cubanos estudiados se encontró un abuelo europeo, en casi un 19 % uno lo africano y en menos de un 1 % un abuelo nativo-americano.

El país de Europa predominante en la composición genética del cubano es fundamentalmente España, aunque también se detecta la contribución de Italia.

El genoma aportado por África a la composición genética de la población cubana tiene como principales contribuyentes a Benin, Nigeria, Camerún, Gabón y sobre todo el norte de Angola, aunque no son los únicos de ese continente.

La científica Marcheco señaló que uno de los temas más complejos de abordar es el de los orígenes nativo-americanos de los cubanos, debido al exterminio que sufrió esa población -la primera encontrada por los colonizadores españoles en la isla- y a que esa huella genética no tiene las misma proporciones que la africana y la europea.