Hasta tres taxistas de los municipios de Arona y Adeje, como mínimo, han sido denunciados recientemente después de ser interceptados en controles por parte de las fuerzas de seguridad.

El caso más grave se produjo en la zona turística de Playa de las Américas. Policías locales de Arona destinados en la patrulla nocturna realizaban un control en las proximidades de los centros comerciales Verónicas y Starco, en la confluencia de la avenida Rafael Puig Llivina y la calle Arquitecto Gómez Cuesta.

Los agentes municipales interceptaron a un chófer que circulaba bajo la influencia de una sustancia estupefaciente. Por dicha infracción, las autoridades administrativas pueden sancionarlo con 1.000 euros.

Pero, además, los funcionarios detectaron que, a pesar de que llevaba clientes en el vehículo, tenía apagado el taxímetro, lo que se considera una práctica ilegal en el transporte de pasajeros.

Por esa irregularidad, a dicho individuo se le puede sancionar con otros 3.001 euros más, según la actual normativa de dicho ámbito profesional.

Por circular drogados, a cada taxista se le retirarán seis puntos del permiso de conducción.

Además, en otros controles efectuados en Adeje, miembros de las fuerzas de seguridad localizaron a un taxista de dicho municipio y a otro de Arona que, mientras se hallaban de servicio, dieron positivo en el control de drogotest que se les efectuó. Supuestamente, uno había consumido cocaína y el otro, marihuana.

Los controles de alcoholemia y sustancias estupefacientes estuvieron autorizados entre el 4 y el 10 de junio en aquellos cuerpos de seguridad municipal que tienen dispositivos de "drogotest".