La Asociación de Amigos de la playa de Las Teresitas, Anaga y su Litoral, de la que actúa como portavoz Lola Schneider, volvió a reiterar la necesidad del derribo del mamotreto, edificio que considera "un monstruo", añadiendo que, pese a que la obra está paralizada, el Gobierno de Canarias pretende legalizarlo, pese a tener conocimiento de que su ubicación es la misma que ocupaba antaño el campo de fútbol de San Andrés y que se anegaba por las aguas marinas cuando subía la marea, dijo.
Schneider también pidió la participación de los ciudadanos en la manifestación prevista para el sábado día 20 a mediodía, ya que la portavoz considera que se crea una muralla que divide el pueblo de San Andrés y la playa de Las Teresitas, al tiempo que manifestó que "el fin último es privatizar esos aparcamientos que se utilizarán en su mayoría para los usuarios de la playa y los huéspedes del hotel que se pretende construir sobre la batería militar". La protesta está previsto que salga desde la avenida de San Andrés, plaza de la iglesia, zona del Infobox hasta el Castillo de San Andrés y culminará junto a la Cofradía de Pescadores.
El párking del hotel fantasma.- El mamotreto, según se comentó en rueda de prensa, mide 11,5 metros de altura y ocupa 12.000 metros cuadrados de superficie, de los que sólo 1.400 metros cuadrados están destinados a comercios.
Por otra parte, los colectivos mostraron su rechazo a la construcción del hotel, que según Lola Schneider contará con 12 plantas y 40 metros de altura. A los 180 metros de longitud se deben sumar los 60.000 metros cuadrados construidos y que será recubierto totalmente por una malla metálica para, según se dijo era para evitar impactos medioambientales, pero que, a juicio de Schneider, "parece Guantánamo".Un estado lamentable.- Lola Schneider y el resto de colectivos denuncian además el mantenimiento de Las Teresitas, que califican como lamentable. Los colectivos que han organizado la manifestación demandan más baños públicos, kioscos dignos, aparcamientos gratuitos, duchas y baños en condiciones, mostrándose partidarios de que la playa se dote de un mantenimiento diario de calidad.