Comienza la transformación de las calles de Santa Cruz para adaptarlas a las bicicletas y patinetes
El Ayuntamiento inicia este domingo, 13 de octubre, en Méndez Núñez, la implantación de la denominada Red de Movilidad Personal, con la que se crearán carriles segregados y ciclocalles en 61 vías del centro de la capital
La ejecución de los trabajos, financiada con fondos europeos, supondrá una inversión de 1,7 millones de euros y se llevará a cabo en un plazo de seis meses

Calle Méndez Núñez, situada en la zona centro del municipio de Santa Cruz de Tenerife. / Andrés Gutiérrez
Comienza la transformación de la zona centro de Santa Cruz de Tenerife para adaptarla a las bicicletas y a los patinetes. El Ayuntamiento chicharrero iniciará este domingo, 13 de octubre, la implantación de la denominada Red de Movilidad Personal o Red Ciclable, con la que se crearán carriles segregados y ciclocalles en un total de 61 vías del casco histórico de la capital chicharrera. La ejecución de los trabajos, financiada con fondos europeos Next Generation, supondrá una inversión de 1,7 millones de euros y se llevará a cabo en un plazo de seis meses.
La primera actuación se realizará en la calle Méndez Núñez. Los trabajos en dicha vía arrancarán este domingo, en horario nocturno, con el asfaltado del carril bus, cuya parada de guagua se ha trasladado a la plaza Weyler. Las labores de asfaltado se realizarán en toda la calle, «bordillo a bordillo», para, posteriormente, proceder al pintado de la vía y a la implantación de un carril segregado, que se destinará al uso exclusivo de bicicletas y patinetes eléctricos.
La implantación de la Red Ciclable continuará, a partir del 28 de octubre, en la calle de El Pilar, que también se asfaltará. Para ello, y según informa el Consistorio chicharrero, será necesario retirar previamente los adoquines. Una vez acabados estos trabajos, y según las previsiones, el Ayuntamiento de Santa Cruz intervendrá en Villalba Hervás, a partir del 11 de noviembre, donde también se tendrán que quitar los adoquines.
El 2 de diciembre, comenzarán las obras en la calle Bravo Murillo. Con respecto al resto de actuaciones incluidas en el proyecto, la Corporación local trasladará la información correspondiente a medida que se acerque la fecha de inicio de las mismas. Eso sí, y según aclara el Ayuntamiento, los trabajos para implantar la Red Ciclable se realizarán por la noche, «con el objetivo de minimizar las molestias a los conductores y evitar problemas con el tráfico».
«Ya ha llegado la fecha de inicio de las obras para implantar la anunciada Red Ciclable en el centro de la ciudad, que también contará con nuevos aparcamientos para los vehículos de movilidad personal (VMP) y con puntos de recarga eléctrica», ha declarado el alcalde de la capital, el nacionalista José Manuel Bermúdez.
El regidor asegura que este proyecto, «financiado con fondos europeos», mejorará la movilidad en Santa Cruz y ayudará a reducir las emisiones contaminantes, «transformando los viajes que se realizan en vehículos a motor en una movilidad activa y sostenible, con bicicletas y patinetes».
Por su parte, el concejal de Servicios Públicos y de Planificación Estratégica, Carlos Tarife, del PP, resalta que, con la implantación de la Red Ciclable, se logrará ese «ansiado cambio» de la movilidad en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, «partiendo de la transformación de la zona centro como ejemplo de buena práctica».
Asimismo, y según afirma Carlos Tarife, este proyecto de la Red de Movilidad Personal ayudará a la consolidación en la capital de la futura Zona de Bajas Emisiones (ZBE), con la que se establecerán restricciones al tráfico, también en el centro de Santa Cruz. Asimismo, apuntó el concejal, esta Red Ciclable ayudará a la reactivación económica de la zona.
La Red de Movilidad Personal que empieza ahora a implantarse en Santa Cruz de Tenerife estará formada, por un lado, por ciclocalles, en las que las bicicletas y los patinetes compartirán carriles con los coches, «porque, por sus características, pueden garantizar la seguridad de conductores y peatones», y, por otro lado, por carriles segregados, es decir, exclusivos para los VMP. Éstos últimos se crearán en zonas donde se debe mejorar la seguridad, ya sea por la velocidad permitida en la vía, por su pendiente o por el nivel de tráfico existente. Estarán separados del resto de carriles para los coches, pero también se colocarán en la calzada. Para ello, se tendrán que eliminar unas 150 plazas de aparcamiento.
La longitud de las ciclocalles será de un total de 16.050 metros, mientras que la longitud de los carriles bici segregados será de 2.420 metros. Además, estos carriles se complementan con 550 metros de aceras-bici, con prioridad de paso peatonal, «para conectar los carriles propuestos con el existente». Con estos cambios, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife pretende incorporar los vehículos de movilidad personal al tráfico de la ciudad.
Asimismo, el proyecto incluye otras actuaciones asociadas a la implantación de la Red Ciclable, como el acondicionamiento de vías; ampliación de aceras; relocalización de servicios, como paradas de taxi o contenedores de residuos sólidos urbanos; reprogramación de semáforos y adecuación de parterres.
Ciclocalles
Las ciclocalles se establecerán en 52 vías del centro de la ciudad. En éstas, las bicicletas y los patinetes convivirán con el tráfico motorizado en los mismos carriles. Eso sí, el límite de velocidad se reducirá a 30 kilómetros por hora y tendrán preferencia los VMP. Para su implantación, éstas no requieren de mayor intervención que la incorporación de señalización horizontal específica a lo largo de todo el recorrido, además de, si fuese necesario, alguna adecuación puntual en los cruces con regulación semafórica.
En concreto, se convertirán en ciclocalles Méndez Núñez, San Isidro, La Rosa, Arquitecto Marrero Regalado, San Francisco, Emilio Calzadilla, callejón Bouza, avenida Marítima, La Marina, plaza del Cabildo de Tenerife, Suárez Guerra, San Vicente Ferrer, Santa Rosalía, Santiago, San Clemente, Numancia, Callao de Lima, Juan Pablo II, Imeldo Serís, avenida Ángel Guimerá, Juan de Padrón, San Francisco de Paula, Valentín Sanz, Prolongación Ramón y Cajal, Fuente Morales, Afilarmónica Ni Fú Ni Fá, puente Serrador, Leoncio Rodríguez, Quevedo, Garcilaso de la Vega, Lepanto, Góngora y Orellana.
También serán ciclocalles la avenida del Carmen, Juan Sebastián Elcano, Eduardo Zamacois, Gilberto Cayol López, Unamuno, avenida Madrid, Luis de la Cruz, puente Nácere Hayek, Salamanca, Islas Canarias, Rambla de Pulido, Comodoro Rolin, Zurbarán, Obispo Pérez Cáceres, calle del Olvido, Domingo Pérez Minik, Horacio Nelson, Enrique Wolfson y avenida Veinticinco de Julio.
Carriles segregados
Los carriles segregados o diferenciados se habilitarán en un total de nueve calles del centro de Santa Cruz. Para su creación, se establecerá en la calzada una línea de separación entre el nuevo carril bici y el carril de circulación para el resto de vehículos, así como una «línea de detención para vía ciclista». Se instalarán pilonas y elementos separadores, entre otras actuaciones. Las calles en las que se colocarán los carriles segregados son: Méndez Núñez, El Pilar, Villalba Hervás, Bravo Murillo, San Sebastián, José Manuel Guimerá, Glorieta Tres de Mayo-El Cabo, avenida Víctor Zurita Soler y Prolongación Ramón y Cajal.
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