Garantías de paso para acceder a los estacionamientos del Distrito Centro

La puesta en marcha de la Zona de Bajas Emisiones precisa de una completa coordinación tecnológica e informática, hasta el punto que será necesario que los lectores de los aparcamientos rotatorios que existen en el interior de la zona estén conectados con la nueva sala inteligente que se habilitará para acreditar que la situación de aquellos que acceden a este ámbito de protección medioambiental en busca de una plaza para su vehículo.

Las fuentes consultadas precisan que los conductores que se trasladen con sus vehículos hasta los estacionamientos que existen en el interior del Distrito Centro tienen plenas garantías para poder transitar y el justificante de pago valdrá como autorización para circular.

Además de permitir la entrada a la Zona de Bajas Emisiones para buscar un estacionamiento, también los vehículos privados contará con un tiempo máximo de estancia en esta zona para abandonarla. La instalación de cámaras inteligentes en los báculos que se repartirán en este ámbito de protección se encargarán de registrar la matrícula de los coches para hacerle un seguimiento desde que entran hasta que salen.

Precisamente el control en los accesos a los estacionamientos rotatorios supondrá el mayor esfuerzo informático en el desarrollo de las medidas de las cámaras inteligentes, explican las fuentes consultas, que insisten en que esta medida también es disuasoria en el tráfico. «Muchos entenderán que dadas las limitaciones y los controles es mejor no acceder a la Zona de Bajas Emisiones. Nuestra intención tampoco es tener el 100% de vehículos eléctricos, que son limpios, sino cambiar la forma de transporte y apostar por la peatonalización.