Cultura | 50 años de la Exposición de Esculturas en la Calle

"El Escape City me permitió conocer esculturas por las que paso a diario"

Alumna del colegio Hispano Inglés, Valeria lidera el equipo que ganó el primer concurso La Santa Cruz de esculturas en la calle

La concejala de Cultura junto a Valeria, a la izquierda, y el equipo ganador.

La concejala de Cultura junto a Valeria, a la izquierda, y el equipo ganador. / El Día

Humberto Gonar

Humberto Gonar

Valeria Cortés, de 17 años y alumna del colegio Hispano Inglés, en la capital tinerfeña, se convirtió en la ganadora de la primera edición del Escape City La Santa Cruz, un juego que organizó la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento chicharrero con motivo de las bodas de oro de la celebración de la exposición de esculturas en la calle.

En esta experiencia pionera, con la que desde el área que dirige Gladis de León no se descarta nuevas ediciones e incluso ampliarlo a los cinco distritos –llegando incluso a organizar un campeonato a nivel de toda la capital–, Valeria Cortés no estuvo sola, pues decidió formar equipo con Eduardo Cebrián y Mario Acuña, compañeros del mismo colegio, y Luz Marina Ravelo, del Cisneros.

Valeria, que resultó ganadora junto su equipo en el sorteo realizado entre los participantes que culminaron la localización de las 17 esculturas en la calle que integraban el Escape City, cuenta que decidió inscribirse después de que los días anteriores unos jóvenes que estaban por la plaza de Weyler le informara de la campaña puesta en marcha por la Concejalía de Cultura. Se trataba de unos animadores del propio departamento municipal que promocionaban la iniciativa.

Para estos alumnos de segundo de Bachillerato, participar en el Escape City fue un adelanto de la EBAU a la que se enfrentarán del 7 al 10 de junio próximo. Valeria, alumna de bachillerado en la especialidad tecnológico, tiene puestas sus ilusiones en estudiar Arquitectura en Granada, mientras que Eduardo y Mario quieren cursar Ingeniería y Luz María alguna de las especialidades vinculadas con la salud, ya sea enfermería o medicina. La nota lo dirá.

Valeria cuenta que, nada más ser informados por los dinamizadores culturales, tomaron el código qr y se inscribieron en esta experiencia que celebra, porque «nos ha permitido conocer mucho más la ciudad en la que vivimos».

Si tuviera que proponer cosas a mejorar de esta primera edición del Escape City, plantearía ordenar las esculturas a descubrir para evitar trayectos largos de idea y vuelta, tal vez con el trazado de un circuito más circular, y hasta en una época con menos calor. Y otra idea, que se alternen las esculturas y no sean las mismas y en el mismo orden para todos.

Valeria, junto a su equipo, partió el mediodía del sábado pasado desde el teatro Guimerá y realizó en unas tres horas 20.000 pasos, según le consta en la aplicación del móvil, en busca de las esculturas incluidas en La Santa Cruz y que las llevó hasta el Parque Marítimo, de nuevo el Guimerá, el García Sanabria y la Rambla, para volver a la avenida de Anaga, La Granja y la Piscina Municipal, donde finalizó con El Reloj de la muerte. Precisamente fue la obra que más le llamó la atención; toda la vida pasando en coche rumbo al colegio por esta zona y no se había percatado del nombre y ni siquiera de su existencia en la zona. La alumna del Hispano Inglés celebra este tipo de iniciativas que decidió afrontar en equipo porque «es más divertido; haces algo diferente entre amigos y disfrutas la ciudad». A la espera del premio, se repartirán entre cuatro 1.500 euros.