El tinerfeño Ayan contará con un ascensor en su edificio de Añaza

La familia se reunió con el Diputado del Común para solicitar una vivienda adaptada tras años de espera

Panorámica del barrio santacrucero de Añaza.

Panorámica del barrio santacrucero de Añaza.

Ayan, un joven de 23 años con polidiscapacidad (física e intelectual) y usuario de silla de ruedas vive en un cuarto piso sin ascensor en Añaza, en Santa Cruz de Tenerife. Su madre Teresa Hernández, acudió recientemente ante la Diputación del Común para solicitar una vivienda adaptada tras varios años de espera.

Hoy, la Diputación del Común ha anunciado que el Instituto Canario de la Vivienda (con un 80% de financiación) y el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife (con un 20%) han accedido a instalar un ascensor en el edificio en el que vivie Ayan junto a su familia en el barrio santacrucero de Añaza.

La madre de Ayan, en compañía de la presidenta de la 'Plataforma Queremos Movernos', Ana Mengíbar, se reunieron con el Diputado del Común, Rafael Yanes, a quien explicaron que está "intentando" que pongan un ascensor en su edificio o conseguir que permuten la vivienda por una adaptada.

"Con la discapacidad de mi hijo, tengo que bajarlo cuatro pisos y él sube gateando porque yo no tengo fuerzas", detalla Hernández.

En esta misma línea, Hernández trasladó que muchas veces le cuesta mucho sacarlo "a la calle" porque tiene artrosis y su "miedo" es tropezarse al bajarlo y caer los dos por las escaleras.

Además aseguró que solicitó un certificado de vivienda no adaptada hace 7 años y desde entonces está esperando.

Rafael Yanes, por su parte, se comprometió en trasladar la problemática, por un lado, al Instituto Canario de la Vivienda para preguntar sobre una alternativa habitacional para esta familia mediante una permuta y, por otro lado, al Ayuntamiento de Santa Cruz, por si es posible acceder a alguna subvención para que las viviendas no accesibles puedan instalar un ascensor.

Dicha petición ha tenido eco en ambas instituciones y este mismo jueves se ha conocido que tanto Ayan como su familia contarán con un ascensor para poder acceder a su vivienda de una manera mucho más cómoda, ganando este joven y su familia en calidad de vida.

"La accesibilidad es una necesidad social, no sólo en espacios públicos, sino también en las viviendas. Tenemos una población cada vez más envejecida y los requerimientos de accesibilidad van hacer más recurrentes con el tiempo", comenta.