Vecinos de Valleseco disfrutan de El Bloque, la ‘piscina natural’ del barrio

Vecinos en su mayoría de Valleseco disfrutaron de las actividades programadas desde el Ayuntamiento de Santa Cruz desde los programas de Distrito Joven, Santa Cruz Vital y Fundación Sostenible con el objetivo de promocionar la nueva zona de baño de El Bloque. 

En realidad, lo nuevo no es el lugar –que fue inventado por los más jóvenes del lugar, que se adueñaron de este área que se localiza en la trasera de los tanque de la BP–. La novedad es la puesta en marcha de este lugar tras las obras que los más intrépidos lo hicieron suyo para tirarse de bomba, cabeza o disfrutando de diferentes peripecias cuando los residentes de Valleseco ya disfrutaban de las playas de Ligrasa –donde se actúa en la actualidad para acondicionar los charcos que contempla la primera fase del proyecto Sol y Sombra–, Los Alemanes, Cory y Acapulco.

En la resaca del día después de que la asamblea vecinal de la playa de Valleseco mostrara su no tajante a permitir el acceso de perros en la playa de Los Alemanes –una postura que el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, reconoció que no le coge por sorpresa–, los más jóvenes secundaron la invitación lanzada desde el ayuntamiento para disfrutar de El Bloque, un mes después de su reapertura, tras el medio año en obras y 500.000 euros invertidos en un acuerdo conjunto entre el Ayuntamiento de Santa Cruz y la Autoridad Portuaria.

Consejo para el usuario: aparcar en la zona más próxima al Cidemat, porque en los tímidos inicios de su puesta en marcha, lograr una plaza para el vehículo se convierte en misión imposible ya, imagine el lector cuando apriete la temperatura estival. Y es que ayer el bien tiempo no se alineó con la organización para hacer más atractiva la zona.

Aún así, jóvenes y mayores disfrutaron de las actividades, mientras el alcalde Bermúdez celebraba con los vecinos que Santa Cruz haya ganado estos 100 metros lineales para el baño. Precisamente desde El Bloque se ve el avance de la anhelada gran playa del barrio, que dejará en el olvido Ligrasa para convertirse en el polo de atracción más cercano a Santa Cruz, lo que se prevé sea una realidad este verano, a la vuelta de la esquina después de 30 años de reivindicaciones.

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