El ultimátum que dio el área de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Santa Cruz para que los parking públicos rebajen sus tarifas, cumpliendo así las resoluciones y órdenes emitidas, está surtiendo efecto. Ya un primer estacionamiento, de los siete inspeccionados, ha reducido su precio. Se trata del parking de la plaza Weyler, cuya tarifa ha pasado de 2,3 euros la hora a 1,5, tal y como se había exigido desde el Consistorio.

Tras rechazar las alegaciones presentadas por todos los aparcamientos, y volver a dar un plazo de un mes para que se cumplieran las resoluciones, Servicios Públicos amenazó a las empresas con imponer sanciones, acudir a la Justicia e, incluso, rescatar las concesiones otorgadas en su momento por el Ayuntamiento para la explotación de los parking.

El concejal de Servicios Públicos, Carlos Tarife, del PP, confía en que, "a partir de ahora, empiecen a sumarse el resto de aparcamientos inspeccionados, sobre todo por una cuestión de competencia, pues ya hay un parking en Santa Cruz que ofrece un precio más bajo". Tarife aprovecha para felicitar a los técnicos municipales "por el trabajo que han realizado, con el objetivo de que los estacionamientos públicos cumpliesen con lo que se estableció en su momento en los pliegos de los contratos".

A raíz de la inspección llevada a cabo en los siete parking públicos del municipio, en 2019, Servicios Públicos detectó «incumplimientos» relacionados con las tarifas, «pues en todos los casos se estaba cobrando más de lo establecido en el contrato», y con el canon que las empresas adjudicatarias deben pagar al Ayuntamiento. Los técnicos municipales fueron emitiendo, por separado y en diferentes fechas, las propuestas de acuerdo para que se corrigieran los incumplimientos. El primer informe fue el dirigido al estacionamiento del Puente Serrador, en abril de este año, y el último, el de la Plaza de España, en junio.

En todas las resoluciones se dio un mes a los parking para que rebajaran las tarifas, cada uno en un porcentaje diferente, en función de los aumentos que se habían producido, y para que abonasen el canon pendiente. Pero todos los concesionarios presentaron alegaciones. Tras analizarlas, el Consistorio comenzó a emitir las órdenes definitivas, en las que se rechaza lo argumentado por las empresas y en las que se vuelve a dar, y ya es el último, un mes para bajar los precios.

«Sin este plazo no cumplen con lo ordenando, entonces iniciaremos expedientes sancionadores e, incluso, no descartamos acudir al juzgado para solicitar medidas cautelares. Además, también podríamos llegar al rescate de la concesión otorgada en su momento por el Ayuntamiento para la explotación del aparcamiento, en el caso de que los incumplimientos sean muy graves. La vía administrativa ya ha finalizado, pues han presentado alegaciones y éstas han sido contestadas. Ahora solo queda que nos hagan caso, como ha hecho el estacionamiento de Weyler», ha explicado Tarife.

Plaza Weyler. Debía reducir su tarifa un 55,6%, pasando de 2,3 euros la hora (0,031 euros el minuto) a 1,5 euros (0,025 euros el minuto). Se le reclama una deuda de más de 7.100 euros. Ya este aparcamiento ha acatado la orden del Ayuntamiento.

Puente Serrador. Debe reducir su tarifa un 66,4%, pasando de 1,9 euros la hora (0,032 euros el minuto) a 1,1 euros (0,019 el minuto). Se le reclama una deuda de casi 50.000 euros.

Zona del Estadio. Debe bajar su tarifa un 16,6%, de 1,40 a 1,20 euros la hora. El Consistorio le reclama una deuda de 46.578 euros.

Puerto Escondido. Debe aplicarse una rebaja del 54%, pasando de 1,95 a 1,26 euros. Este precio solo se cobra durante la primera hora. La tarifa en el resto de horas oscila entre los 1,30 y 1,35 euros, pero también es superior a la máxima permitida. En este caso, es el Ayuntamiento el que tiene que devolver 400 euros a la empresa.

Tomé Cano. El precio debe reducirse un 30%, pasando de 3,1 a 2,3 euros. El Consistorio le reclama una deuda de 38.710 euros

Ramón y Cajal. La tarifa debe bajar un 46,3%, pasando de 2,2 a 1,53 euros. El canon lo tiene al día.

Plaza de España. La tarifa debe bajar un 38%, de 2,1 a 1,5 euros. Se le reclama 20.640 euros.