Unos 500 mayores de todos los distritos de Santa Cruz de Tenerife celebraron ayer el Día Internacional de las Personas de Edad con actividades y la música de Pepe Benavente. El alcalde de la capital tinerfeña, José Manuel Bermúdez, y la concejala de Acción Social, Rosario González, participaron en las acciones y los trece talleres, que se desarrollaron gracias a la organización de la Mesa Técnica de Mayores del Ayuntamiento y la colaboración de Cruz Roja, la Asociación de Ayuda a Personas Dependientes de Canarias (Apedeca) y la entidad Teléfono de la Esperanza.
Muchos de los asistentes están integrados en el programa Santa Cruz Vital, aunque también acudieron personas de muchas de las asociaciones de mayores del municipio, entidades que trabajan con este colectivo y de forma independiente. Entre otras cosas, hubo talleres de diversa temática, como motricidad, expresión artística (bodypaint), risoterapia, juegos de estimulación con lugares emblemáticos de Santa Cruz, el arte de la palabra, bailoterapia, danza y salud (tango) y el arte del ritmo (percusión), coordinados por la entidad Podium.
Cruz Roja estuvo al frente de los talleres de desmontar mitos, bingo musical, aportaciones de las personas mayores a la sociedad, qué le dirías a la gente joven y gimnasia pasiva.
Como acto central de la jornada estuvo la lectura del manifiesto por la celebración del Día Internacional de las Personas de Edad, donde una persona mayor de cada uno de los cinco distritos leyó una parte del mismo, poniendo en esta edición un foco muy especial en la figura de las mujeres mayores, las cuales, siendo mayoría en el colectivo de personas de edad, han de afrontar importantes desafíos, como la doble condición de su género y ser una persona mayor. Después se procedió a un sorteo de diversos regalos y detalles para los mayores, así como la actuación de Pepe Benavente.
Bermúdez afirmó que «Santa Cruz se suma a esta efeméride para visualizar el valor de hacerse mayor, todos lo hacemos, pero también las dificultades que conlleva muchas veces este natural tránsito por el tiempo» y recordó que «en noviembre se cumplen dos años del inicio de un proyecto que respondía a una necesidad detectada en la crisis sanitaria y social de la Covid-19: Santa Cruz Vital, que nacía para responder a la realidad de que en Santa Cruz viven más de 40.000 mayores de 65 años y hoy funciona, responde y mejora para dar respuesta y paliar la soledad no deseada».
«Estas personas –prosiguió el regidor– vieron cómo la pandemia reducía su capacidad de socialización, de reunión y provocaba una mayor incidencia de la soledad y precisamente por eso el programa Santa Cruz Vital oferta actividades a 590 participantes de 47 asociaciones» y recalcó que «nuestra intención es no dejar solos a nuestros mayores, porque se lo merecen, por su ejemplo y esfuerzo de toda una vida, pero también porque es de justicia y porque cumplimos con lo que nos comprometemos».
