El área de Obras e Infraestructuras ha procedido a adjudicar la primera de las dos obras que en los próximos años supondrán un cambio en la primera línea del pueblo de San Andrés, según la valoración del concejal delegado de este departamento, Dámaso Arteaga.
A falta de que lo ratifique la primera Junta de Gobierno que se celebrará en septiembre, tras el período vacacional, la mesa de contratación ya ha encomendado la remodelación de la calle de El Dique, junto a avenida marítima de este pueblo de Anaga, que tiene un presupuesto de 900.000 euros y un plazo de ejecución de siete meses. Una vez se formalice el contrato y se proceda al acta de replanteo comenzará el plazo previsto para la transformación de la primera vía que se localiza entre la avenida marítima y el interior del pueblo de San Andrés.
Esta es una de las dos grandes obras que contribuirán a dar un cambio importante en la imagen de este pueblo de pescadores de la capital tinerfeña. La segunda se centrará en la zona del antiguo Castillo de San Andrés, y se ejecutará en la última etapa de la mejora de la calle El Dique.
El frente marítimo de San Andrés se beneficiará de una inversión de dos millones que corresponde con las dos actuaciones, al margen de otras obras que se han desarrollado en este mandato como el Polideportivo o la rehabilitación del viejo puente.
El concejal de Obras e Infraestructura advirtió que esta obra es fruto del consenso con los vecinos, a los que se les ha informado de la evolución del proyecto e incluso se han incorporado mejoras. De ahí que haga énfasis en que el inicio de la obra de peatonalización, con una vía de tráfico para dar servicio y potenciación del área comercial está supeditada a que se habiliten los nuevos aparcamientos en la zona del mamotreto, una actuación que depende del área de Servicios Públicos. De hecho, en la Junta de Gobierno del 12 de junio pasado se aprobó el proyecto para habilitar los estacionamientos que asumirán las plazas que desaparecerán con la obra de la calle de El Dique. Se trata de una obra que tiene un presupuesto de 360.584 euros a ejecutar en dos meses, tiempo que se invertirá para habilitar en la parcela de 7.320 metros cuadrados, 259 plazas para vehículos ligeros, 29 para motos, 7 para personas con movilidad reducidas, 4 módulos de 6 plazas para bicicletas y una para vehículos de emergencia; además del cerramiento se prevé instalar iluminación que se alimente con energía solar.
Respecto a la obra de la calle El Dique, el alcalde, José Manuel Bermúdez, explica que la prioridad será el uso peatonal y de ocio, dejando un carril para el tráfico restringido de vehículos de vecinos y carga y descarga y añade que «por otra parte se prevé dotar a la línea de aparcamiento de la avenida Marítima de una acera, ya que actualmente no existe un itinerario peatonal entre estos aparcamientos y las vías aledañas» y apostilla que «se dotará a esta calle de entrada al pueblo con una iluminación adecuada que sea atractiva para los visitantes y turistas, además de que con la actuación prevista en el entorno del Castillo se modernizará y embellecerá el frente de San Andrés».
