El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife invertirá unos 500.000 euros en la urbanización de la calle Juan Marín Vives, situada en Llano del Moro, en el Distrito Suroeste. Se trata de una de las vías de la capital que aún carecen de los servicios mínimos, como aceras, calzada o alumbrado. El Consistorio ha sacado ya a licitación, por un importe de 45.000 euros, la redacción del correspondiente proyecto de urbanización, la cual se adjudicará en breve. La empresa que gane el concurso público deberá entregar el proyecto en el plazo de dos meses y medio, para, a continuación, licitar e iniciar la ejecución de las obras.
En concreto, el Consistorio, a través del área de Infraestructuras, que dirige el edil nacionalista Dámaso Arteaga, intervendrá en un tramo de la citada calle, cuya longitud aproximada es de 175 metros, con un ancho de 10 metros. El proyecto deberá establecer las actuaciones necesarias para dotar a esta vía, en el tramo «existente de tierra con edificaciones en su margen derecho», de aceras, calzada, conducciones y redes de servicio, así como de alumbrado público. Asimismo, «se analizará el tramo ya ejecutado para establecer si es necesario proceder a una posible remodelación, con el fin de adaptarlo a la normativa de accesibilidad y dar un tratamiento homogéneo a toda la calle».
El Ayuntamiento chicharrero aclara que la empresa a la que se le adjudique la redacción del proyecto también deberá asumir todos los «trabajos de campo complementarios que, a juicio del técnico gestor, sea necesario ejecutar, tales como topografía o geotecnia, así como todas las actuaciones complementarias que haya que llevar a cabo en cuanto a las relaciones y coordinación con los servicios del Consistorio (Planeamiento, Tráfico o Infraestructuras) u otras administraciones públicas y entidades implicadas».
La memoria del proyecto, además de la descripción de las obras necesarias y del plazo de ejecución de las mismas, también deberá contener un informe y estudio geotécnico de la zona; una evaluación de impacto ecológicos; cálculos hidráulicos, estructurales y lumínicos; la justificación de los precios; un listado de bienes y derechos afectados, y la explicación de los desvíos de tráfico y accesos peatonales que deban llevarse a cabo, entre otros aspectos.
Con respecto, al listado de bienes y derechos afectados por la ejecución de las obras, se deberá definir «sobre planos parcelarios las superficies ocupadas, acompañando la relación de titulares de las propiedades», y establecer, en el caso de que sea necesario, una valoración del coste de las indemnizaciones que correspondan.
El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través del área de Infraestructuras, nombrará un técnico gestor, que será el responsable del seguimiento de la redacción del proyecto de ejecución de los trabajos y la posterior dirección de obra. «El técnico gestor podrá requerir al adjudicatario cuantas veces lo considere preciso, en orden a la clara definición de cuantos extremos estime oportunos».
Aún son numerosas las calles en Santa Cruz de Tenerife, situadas, fundamentalmente, en los distritos del Suroeste y Ofra-Costa Sur, que presentan algún tramo sin aceras. La calle Juan Marín Vives es una de ellas y, por ello, se procederá a su urbanización.
