eldia.es

eldia.es

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cámaras de reconocimiento de matrículas para restringir el tráfico

A la Zona de Bajas Emisiones que se creará en la capital solo podrán acceder coches eléctricos

En la imagen se muestra la Zona de Bajas Emisiones elegida por el Ayuntamiento de la capital para restringir el acceso de vehículos, aunque se encargará un estudio para determinar la más adecuada. En un principio, el perímetro queda delimitado por la calle Ni Fú Ni Fá, Ramón y Cajal, plaza Weyler, Méndez Núñez hasta el Cuartel de Almeyda, y avenida de Anaga hasta el Museo de la Naturaleza | e.d.

Santa Cruz colocará cámaras de reconocimiento de matrículas para reducir el tráfico en la que se denominará Zona de Bajas Emisiones (ZBE). En esta solo podrán circular vehículos eléctricos, los coches que se dirijan a garajes de viviendas o los que realicen operaciones de carga y descarga, y los servicios de emergencia. En un principio, se ha establecido un perímetro delimitado por las calle Ni Fú Ni Fá, Ramón y Cajal, parte del puente Galcerán, plaza Weyler, Méndez Núñez hasta el Cuartel de Almeyda, parte de la Rambla, avenida de Anaga y avenida Marítima hasta el Museo de la Naturaleza y Arqueología. Se trata de uno de los proyectos presentados por el área de Infraestructuras del Ayuntamiento en el marco de las convocatorias de los fondos europeos Next Generation, «el cual ha sido aprobado provisionalmente».

Así lo ha indicado el concejal responsable del área, el nacionalista Dámaso Arteaga, quien informa de que este proyecto supone una inversión de 14 millones de euros. El edil de Infraestructuras aclara que se encargará un estudio para determinar de manera definitiva cuál será la primera Zona de Bajas Emisiones en Santa Cruz. «Tenemos cuatro alternativas, de las que hemos elegido la que consideramos más prudente. De todas formas, será el estudio el que establezca la más adecuada. En un futuro, dicha zona se podría ampliar», explica el edil, quien recuerda que el objetivo de este proyecto no es otro que reducir las emisiones de CO2 en la ciudad, en este caso, en el centro, que es donde más tráfico se concentra.

«En definitiva, se trata de restringir el tráfico en una serie de calles en el centro de la capital, controlando el acceso de vehículos mediante la instalación de cámaras de reconocimiento de matrículas», manifiesta el edil. De esta forma, y tal y como ya lo adelantó EL DÍA en octubre, el Ayuntamiento Santa Cruz de Tenerife pretende triplicar la zona de acceso restringido al tráfico de coches del centro de la ciudad, pasando de los 226.697 metros cuadrados de superficie actuales, que corresponden al casco histórico, formado sobre todo por calles peatonales, a 796.622 metros cuadrados.

Otro de los proyectos que ha presentado el área de Infraestructuras del Ayuntamiento chicharrero a la convocatoria de los fondos europeos Next Generation, y que, en un principio, está aprobado, es la creación de una Red Cyclable, con la que se pretende facilitar la convivencia en Santa Cruz entre los vehículos, las bicicletas y los patinetes eléctricos. «En concreto, esta actuación consiste en reducir a 30 kilómetros por hora la velocidad en determinadas calles y vías de la ciudad. A lo largo de este año también encargaremos un estudio para establecer qué zonas formarán esta Red Cyclable. Empezaremos por la zona centro, pero se extenderá a otros puntos del municipio», apunta el concejal.

A este proyecto se suma el denominado Carril Bici Ciudad 5 Minutos, propuesto también por la Concejalía de Infraestructuras de Santa Cruz en el marco de las convocatorias de los citados fondos europeos. En este caso, la iniciativa consiste en la creación de un carril de uso exclusivo para patinetes eléctricos y bicicletas en el municipio, que permita a los ciudadanos que utilicen estos vehículos de movilidad personal (VMP) «poder desplazarse entre cualquier punto de ciudad en unos cinco minutos».

«También en este caso empezaremos por el centro, por la Zona de Gran Afluencia Turística, pero la idea es que, en un futuro, los ciudadanos se puedan desplazar por un carril para vehículos de movilidad personal desde, prácticamente, cualquier distrito», matiza el concejal responsable del área.

En este proyecto se propone la eliminación de un carril de circulación de coches o de zonas de aparcamientos, «con el fin de destinarlo a una vía ciclista». Se calcula que dicha vía exclusiva para el uso de VMP tendrá una distancia de 14,8 kilómetros.

Compartir el artículo

stats