Vecinos de Almáciga sienten que predican en el desierto aunque viven junto al mar. Ocurrió hace 15 días, cuando se colocaron las primeras vallas, y volvió a suceder el pasado fin de semana. «Han instalado barreras en el margen de la vía; ahora aparcan invadiendo la calzada ya no se puede pasar».

«Han suprimido más de 35 plazas de aparcamientos y justo donde no había problema en la playa de Almáciga lo han creado». El dirigente de la Asociación de Vecinos Nuestra Señora de Begoña, Alejandro Sosa, resume de esta forma la gestión desarrollada por el ayuntamiento de Santa Cruz, cuando hace quince días se procedió a instalar unas vallas en la zona donde estacionaban los vehículos en la zona más próxima al mar.

«Nadie dijo que esa zona era un problema estacionar, pero son especialistas en crear estas situaciones de caos donde no existen», explica Alejandro Sosa, que cree que el equipo de gobierno municipal confundió las críticas lanzadas por los residentes sobre las caravanas que permanecían aparcadas junto a la playa, incluso cuando estaba en vigor el toque de queda. «Cuando comenzó el nivel 4 el ayuntamiento aplicó en Las Teresitas, Las Gaviotas y el muelle de Añaza la prohibición de cerrar los accesos a partir de las 22:00 horas y se olvidó de Anaga. Salimos a denunciarlo y lo corrigieron; de esta forma ya estaba resuelto el problema porque ya las caravanas dejaban de pernoctar aquí y se evitaba pasar días estacionados allí».

Para sorpresa de los residentes, hace quince días se comenzó a instalar una valla en el margen más próximo al mar de la playa de Almáciga. «Pero es que encima no lo pusieron entre la calzada y la zona donde se aparca, sino que las instalaron a mitad del terreno donde antes se metían los coches, sin afectar al tráfico. ¿Qué ha ocurrido? Ahora los vehículos los colocan en la parte libre sin vaya, y queda medio turismo invadiendo la calzada. Así, los coches están mal estacionados –cosa que antes no ocurría– y encima ocupan el carrillo, lo que impide que puedan pasar dos turismos a la vez. Conclusión: los gestores son especialistas en crear problemas donde no los hay», incide Alejandro Sosa.

Vecinos y comerciantes de Almáciga insisten en destacar que «si algo hace falta precisamente en la playa son aparcamientos, y justo lo que han hecho es suprimir unas treinta y cinco plazas, mientras en la zona del Roque de las Bodegas marcaron aparcamientos rotatorios que nadie vigila. No se enteran», se lamentan.