El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través de Hacienda, abrirá el segundo periodo de pago voluntario de impuestos el 16 de septiembre, que es el que corresponde a las obligaciones tributarias de las empresas ubicadas en el municipio. En concreto, estas deberán abonar antes del 22 de noviembre el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y la Tasa de Basura.

Los contribuyentes podrán pagar sus recibos en las entidades bancarias colaboradoras (Caixa, Banco Bilbao Vizcaya, Santander, Cajasiete y Banca March) utilizando la carta de pago, la cual se puede obtener en el área privada de la sede electrónica municipal (a la que se puede acceder con certificado electrónico, DNIelectrónico o clave permanente), desde la web del Ayuntamiento (www.santacruzdetenerife.es), o acudiendo a las oficinas de atención ciudadana. Con la carta se podrá realizar el abono en los cajeros automáticos, sedes electrónicas o aplicaciones móviles de los citados bancos.

Los recibos domiciliados, que cuentan con un 3% de descuento, serán cargados en cuenta a partir del 4 de noviembre. Quienes domicilien en sus bancos el pago de los impuestos con posterioridad al 17 de agosto, tendrán que esperar hasta el próximo año para que dicha medida surta efecto.

«Estamos valorando distintas opciones para introducir más medidas de estímulo fiscal»

Juan José Martínez - Concejal de Hacienda

El concejal de Hacienda, Juan José Martínez (CC), recuerda que este año la tasa de recogida de residuos para los negocios tiene una rebaja del 50%. «De esta medida se verán beneficiadas 13.369 empresas y autónomos, es decir, el 100% de los contribuyentes. Esta reducción supone más de dos millones de ahorro fiscal para los negocios situados en el municipio».

Asimismo, Martínez señala que el próximo año, «si la situación económica en Santa Cruz no se ha recuperado», también se aplicará una bonificación en la Tasa de Basura para negocios, que será del 25%. Con esta medida de rebaja fiscal, apunta el concejal, el Ayuntamiento pretende contribuir a mejorar la situación de las empresas ante la actual crisis del coronavirus Covid 19, sobre todo de pymes (pequeñas y medianas empresas) ligadas al comercio y la restauración, y de autónomos, «con el fin de favorecer la reactivación económica en la ciudad y evitar el cierre de más negocios y la pérdida de empleo».

«Estamos convencidos de que esta rebaja fiscal es una medida mucho más eficaz que el reparto de subvenciones, porque llega a todos los posibles beneficiarios sin discriminar si han podio acceder a la información, si tienen medios para tramitar una subvención o si presentan dentro de plazo», indica el edil. En este sentido, anuncia a EL DÍA que desde el área de Hacienda se están valorando distintas opciones que «nos permitan introducir más medidas de estímulo fiscal en función de los escenarios económicos que tengamos para el próximo año». «La prioridad para el grupo de Gobierno (CC, PP, y la edil de Cs Evelyn Alonso) es que consigamos recuperar al menos los niveles de empleo previos a la pandemia y la política fiscal tiene un papel importante en ello. Nuestra baja presión fiscal es uno de los elementos más importantes señalados en el reciente estudio sobre ciudades españolas con más capacidad y atractivo para la inversión», ha declarado.

Con respecto a los tributos que tendrán que pagarse en este segundo periodo de abono voluntario, el Ayuntamiento prevé recaudar unos 9,3 millones de euros. De estos, 7,5 millones corresponden al Impuesto de Actividades Económicas, por lo que la recaudación cae, «debido a la crisis», un 6,3% en relación al presupuesto de 2020. La tasa de residuos sólidos también se reduce hasta los 1,8 millones de euros, debido a la bonificación del 50%.

Por otro lado, en la actualidad, continúa abierto el primer periodo de pago de impuestos, que es el que corresponde, fundamentalmente, a las obligaciones tributarias de los ciudadanos. El plazo empezó a contar el 17 de mayo y finalizará el 17 de septiembre. Los tributos que se incluyen son: IBI (impuesto de bienes inmuebles) de naturaleza urbana; el IBI de características especiales; el rodaje del coche; la tasa de residuos para viviendas; y la tasa por utilización privativa o aprovechamiento especial de bienes de dominio público municipal: vados, reserva de aparcamiento y cajeros.

Martínez recuerda que tanto para los ciudadanos como para las empresas existe la posibilidad de establecer un plan personalizado de pagos y también de fraccionar la deuda, «con el objetivo de que a los contribuyentes les sea más fácil hacer frente a sus obligaciones, sobre todo teniendo en cuenta la actual situación de crisis».