Dirigentes de la asociación de vecinos El Pescador, con su presidente Gabriel Rodríguez al frente, celebraron días atrás una reunión con el concejal de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Santa Cruz, Guillermo Díaz Guerra, así como los jefes de Servicios Urbanos de Titsa y del área de Servicios Públicos, para comunicarle el malestar de los vecinos por los problemas ocurridos el pasado 12 de junio, cuando decenas de vecinos se quedaron en la parada de la avenida de San Andrés, porque las guaguas pasaban llenas.

El jefe de Servicios Urbanos de Titsa solicitó disculpas por un problema de coordinación, que motivó que los usuarios tardaran hasta 45 minutos en poder acceder al transporte público y explicó los dos operativos que tiene diseñados la compañía, según sea temporada de verano o de invierno. Titsa se comprometió a intensificar los controles con inspectores para evitar que se repita.

Cierre de la plaza.

Entre la media docena de asuntos abordados con el concejal de Servicios Públicos, la asociación El Pescador solicita el cierre de la plaza Manuel Cruz, que se encuentra por fuera del tanatorio, porque entienden que no cumple el fin para la que se diseñó y solo se ha sevido para que algunos «realicen sus necesidades fisiológicas», salvo cuando está abierta la cripta. Pore ello, reclamaron la instalación de una reja y una puerta. El concejal reconoció que no es partidario del cierre de espacios públicos y emplazó a la directiva de la asociación a dirigirse al distrito de Anaga, para hacer constar esta petición.

Cuidar el cementerio.

La asociación El Pescador reclama la mejora de su cementerio, «para evitar perderlo», y propone el vallado perimetral, mejorar la iluminación y reformar la capilla.

Díaz Guerra recordó que existe un compromiso municipal para la mejora y que las obras nuevas son competencia de Infraestructuras, para asegurar que el Ayuntamiento apuesta por la conservación del cementerio. Los vecinos insistieron en la necesidad de mejorar la iluminación, a lo que accedió Díaz Guerra al ser de su competencia, a diferencia de lo que ocurre con la capilla y el vallado.

Saneamiento y poda.

El Pescador insistió en un proyecto de saneamiento para la ladera, que impida filtraciones de aguas fecales porque las actuales tuberías están obsoletas, así como la necesidad de mejorar la limpieza, a lo que se comprometió Díaz Guerra, que reforzará el servicio, si bien dijo que el mantenimiento de los solares es responsabilidad de los propietarios y corresponde a Urbanismo requerirlo.

También se insistió en la poda de los laureles de india y el concejal recordó la dificultad de intervenciones severas, por la edad de los ejemplares. No obstante, se revisarán las ramas que pasen sobre viviendas, si bien se descartó su supresión. Díaz Guerra apostó por una limpieza más intensa.

Pendientes del estudio del puente

Al margen de la reunión celebrada con la asociación de vecinos El Pescador, el concejal de Infraestructuras de Santa Cruz, Dámaso Arteaga, manifestó a EL DÍA que su departamento está a la espera de recibir las conclusiones del estudio que determinará el estado en el que se encuentra el puente del pueblo de pescadores. Construido en los años treinta del siglo XX y cerrado al tráfico pesado –más de 3,5 toneladas de peso– desde finales de mayo por la caída de cascotes, Arteaga precisó que el diagnóstico incluirá los datos del estudio con las pruebas que se han enviado a Madrid. Las conclusiones permitirán conocer la situación, pero será la dirección facultativa de la obra la que determine qué hacer. En principio está previsto que mañana o pasado ya se puedan tener las conclusiones del estudio, precisó el edil.