El regidor muestra uno de sus cuadernos con anotaciones de proyectos estratégicos para rememorar el día que consiguió el compromiso del Gobierno de Canarias y el Cabildo para costear la playa, después de pedir a su partido rechazar los Presupuestos Estatales. Así sorteó la negativa de Costas a poner dinero.

Después de 35 años, comienzan las obras en Valleseco.

Valleseco tuvo un serie de problemas gordos que ha hecho que se retrase durante muchos años. Uno de ellos fue la declaración de BIC del Gobierno de Canarias, que motivó que el Puerto la recurriera y se tuvo que producir dos sentencias, la última del TSJC, donde le da la razón al Puerto y se anula. Mientras ese contencioso estuvo en los juzgados no se pudo seguir tramitando el tema de la playa porque cada vez que ibas a Costas, en Madrid, te decían que no querían hablar hasta que el juzgado se pronunciara.

Y también la declaración de impacto medioambiental.

Ese expediente dependía del Ministerio y también tardó el máximo que la ley permite. Hicieron el informe en el mes número 24. Era un informe favorable condicionado y tuvimos que modificar cosas y eso hizo que todo se retrasara. A esto se suma, en 2017, cuando una vez superado el trámite de la sostenibilidad y el BIC y solo quedaba ver quién ponía el dinero. En dinero me senté, le dije en Costas que teníamos el proyecto y el dinero y pregunté cuánto y cómo iban a hacer su aportación. A mi me dijeron en Madrid que Costas no iba a poner dinero, sino que todas las anualidades estaban comprometidas con la playa de Santa Cruz de La Palma, que costó casi 20 millones de euros.

¿Y cómo se resolvió?

Eso provocó incluso que pidiera a mi partido que no apoyara los Presupuestos Generales del Estado de Mariano Rajoy porque no iban a incluir la financiación para Valleseco. Tras una carajera con Ani Oramas, recibí una llamada del presidente Fernando Clavijo que me garantizó que el dinero que no fuera a poner Costas lo aporta el Gobierno de Canarias, que se complementa con el Cabildo. De ahí que el proyecto se costee con fondos del Ayuntamiento, el Gobierno, el Cabildo y la Autoridad Portuaria, algo determinante para que se inicien ahora las obras.

El gran ausente es Costas.

Está claro que Costas no quería financiar esta obra. Otra decisión importante de la Autoridad Portuaria, siendo presidente Pedro Rodríguez Zaragoza, que la confirma Pedro Suárez, es no desafectar los terrenos y que sigan siendo portuarios. Si el terreno de Valleseco llega haber sido de Costas no se hubiera hecho la playa. Este proyecto ha sufrido muchas vicisitudes.

¿Y la adaptación urbanística?

Fue importante desde el punto de vista el Plan Especial que motivó un retraso porque desde el punto de vista urbanístico no se aclaraba lo que iba a ocurrir en Valleseco y se tuvo que redactar y aprobar. Ahí se marcaba la ordenación de lo que se va a hacer ahora. Esto era algo inédito.

¿Cuál es la situación actual?

Tenemos dos proyectos en marcha. Uno, ambicioso, del que hoy se coloca la primera piedra, y otro más pequeño pero también de utilidad, como El Bloque y la playa de Acapulco, que está caminando y el convenio está a punto de firmarse, con medio millón que aporta íntegramente el Ayuntamiento y dura cuatro meses.

¿Y lo paga todo la capital?

Es más ágil dar el dinero el Ayuntamiento y que ejecute la obra el propietario de terreno.

¿Ampliará la zona de playa?

El resultado de la intervención será en un kilómetro del litoral y es la suma de dos proyectos.

Pero no es comparable un proyecto con el otro.

Pero igualmente va a dignificar la zona, tanto en la mejora de El Bloque, como en el ámbito entre la torre de Salvamento Marítimo y el Cidemat, que es donde se va a actuar desde ahora.

¿Y qué pasa con el Cidemat?

El convenio de la playa obliga al Cabildo a redactar un proyecto y reconstruir el Cidemat donde está; está firmado y lo tiene que cumplir y no sé qué pasos está dando para eso.

¿Qué más proyectos estratégicos figuran en su cuaderno?

En este tengo apuntado Valleseco, Viera y Clavijo, enlace Puerto-Ciudad, Ireneo González y Palacio de Cartas. Todos esos ya están en marcha.

¿La playa estará acabada en los 22 meses de plazo?

Para mí lo más importante no es que se culmine pronto sino que el proyecto se culmine bien y se desarrolle tal y como se ha prometido y que la zona de baño sea un ejemplo por ser cómoda, confortable, accesible para todos los vecinos de Santa Cruz. Si se hace en dos años o dos años y medio, no me importa tanto.

¿Va a justificar los 35 años de lucha vecinal?

Estoy convencido que sí. Al final es cuestión de dignificar una zona que se utilizaba para el baño; como yo, miles de chicharreros aprendidos a nadar ahí.

¿El proyecto será el orgullo de César Manrique que participó en la lucha vecinal?

Ahora se va a ejecutar una primera fase, quedaría la parte de arena que no está contemplada ahora. Para que esté completo, como a César Manrique le hubiera gustado, sería importante incluir la parte de arena y es importante irla desarrollando y hay que empezar a trabajar. El objetivo durante este tiempo era empezar algo porque ir a por las dos partes hubiera sido más tiempo.

¿Ha influido que sea de Valleseco para sacar el proyecto?

Nada cambiaría porque es la zona más urbana de Santa Cruz para bañarse. La primera manifestación a la que asistí en mi vida fue a favor de la playa de Valleseco. Soy del barrio y es diferente, pero sí le digo que no cambio Valleseco por un hotel de primer nivel; me meto en el agua y recuerdo mi niñez.